Aceite de pescado en polvo: Efectos en porcino

DVM, PHD. Alfredo J. Escribano.
[email protected]

1. CERDAS HIPERPRODUCTORAS: NECESIDADES DE NUEVAS ESTRATEGIAS DE ALIMENTACIÓN

Las mejoras en genética y manejo del porcino han dado lugar a una cerda moderna: hiperprolífica (15.1 total de lechones nacidos por camada) y alta productora (11,5 lechones destetados por camada).

Para camadas de rápido crecimiento y de mayor tamaño, la demanda de leche y la producción de nutrientes se han incrementado sustancialmente (Tabla 1). En 1985, se estimó que la cerda promedio produce 6,9 kg de leche/día por camada, mientras que en 2012 se estima que la producción de leche puede ser de hasta 9,2 kg/día; con un crecimiento de 2,35 kg/d por camada. Esto es un 34% superior a la producción de leche estimada para la cerda de referencia del pasado.

TABLA 1. Comparación entre los parámetros productivos de las cerdas modernas de élite y las cerdas de referencia del pasado.

1985 2012
Valor medio Cerdas estándar: valores medios Cerdas modernas: valores medios
Total lechones nacidos (n) 11.2 13.4 15.1
Total lechones destetados (n) 8.6 10.3 11.5
Ganancia peso camada (kg/d) 1.6 2.09 2.35
Producción de leche (kg/d) 6.9 8.2 9.2
Producción nutrientes en leche (g/d)
Lactosa 385 458 512
Proteína 379 450 501
Grasa 526 626 699

El desarrollo de la cerda moderna también ha dado lugar a un animal con menos reservas de grasa corporal y un menor apetito. Por lo tanto, los programas de alimentación de cerdas deben garantizar un óptimo consumo de nutrientes y energía para apoyar este alto nivel de producción de leche, evitando que la cerda tenga pérdida de peso corporal y para maximizar a largo plazo la productividad de la cerda.

Suplementar lípidos tiene un gran impacto para las cerdas prolíficas y de alta producción, por la gran demanda de energía necesaria en la producción de leche

2. NUTRICIÓN DE ÁCIDOS GRASOS ESENCIALES (AGE) DURANTE LA LACTACIÓN

La esencialidad del ácido linoleico y α-linolénico (ácidos AGE) en animales se debe a la ausencia de enzimas desaturasas, que son capaces de introducir dobles enlaces distales a partir del carbono 10 de ácidos octadecanóicos. Las hembras en lactación segregan cantidades significativas de estos AGE en la leche durante la lactación, estos ácidos grasos son conocidos por ser esenciales para el crecimiento y desarrollo de la camada amamantada.

Recientemente se ha sugerido que la cerda en lactación moderna segrega AGE en la leche movilizando las reservas adiposas corporales. Se postuló que una excesiva secreción dietética y movilización de AGE en la leche podría dar lugar, en algún momento, a una deficiencia de AGE y la reproducción podría verse afectada. Además, esta deficiencia podría corregirse mediante el complemento de AGE en la dieta. La implicación de AGE en los procesos de reproducción sugiere que las posibles deficiencias podrían causar infertilidad de las hembras, lo que resultó ser cierto, como se analiza más adelante.

2.1. Metabolismo de los ácidos grasos esenciales

Las dos familias esenciales de ácidos grasos son los “omega 3 o n-3” y los “omega 6 o n-6”. Los animales pueden convertir los ácidos octodecanóicos de la dieta (ácidos grasos parentales: linoleico y alfa-linolénico) a ácidos grasos de cadena larga poliinsaturados (LC-PUFA) por enzimas desaturasas y elongasas.

En la familia n-6, el ácido linoleico puede ser convertido en ácido γ-linolénico (C18:3n-6), ácido dihomo-γ-linoléico (C20:3n-6), ácido araquidónico (ARA) (C20:4n-6) y otros ácidos grasos.

En la familia n-3, el ácido α-linolénico (C18:3n-3) puede ser convertido en ácido eicosa- tetraenoico (C20:4n-3), ácido eicosapentaenoico (C20:5n-3), ácido docosahexanoenoico (C22:6n-3) y otros ácidos importantes LC-PUFA.

Conversiones de ácidos octadecenoicos a LC-PUFA están mediados por enzimas que son compartidas por los ácidos grasos n-3 y n-6. Estas enzimas tienen mayor afinidad por los ácidos grasos n-3 que por los ácidos grasos n-6. Así, la conversión de ácidos grasos n-6 a LC-PUFA es reducido por el aumento de la disponibilidad de ácidos grasos n-3 (disminuyendo la proporción de ácidos grasos n-6:n-3). Ácidos grasos n-3 y n-6 (ácidos dihomo-γ-linolénico, araquidónico y eicosapentaenoico) son precursores de diversos eicosanoides por diferentes vías, en las que enzimas tales como ciclooxigenasa, lipoxigenasa, endoperóxido isomerasa y otras están involucradas. Los eicosanoides incluyen prostaglandinas (de las series 1, 2 y 3), leucotrienos y tromboxanos.

2.2. Papel de los AGE sobre los rendimientos de la cerda y camada durante la lactación

Un resultado deseado de las dietas para cerdas suplementadas con ácidos grasos n-6 y n-3 (usando lípidos, ya sea vegetales o de origen marino) es, también, incrementar las concentraciones de LC-PUFA en los tejidos de los lechones neonatales. Los potenciales beneficios en los lechones de estos ácidos grasos incluyen el desarrollo neural y cognitivo, mejora de la respuesta inmune y mejora de la función protectora del intestino. Farmer et al. y Yao et al., demostraron que la suplementación de ácidos grasos n-3 (harina de linaza o aceite de lino) a dietas de cerdas lactantes aumentó la respuesta inmune de los lechones lactantes y mejora la supervivencia de los lechones.

El aumento de las concentraciones relativas del ácido α-linolénico (bajando el ratio n-6:n-3) da como resultado una bajada en la conversión de ácido linoleico a LC-PUFA e incrementa la conversión del ácido α-linolénico a sus derivados. Estos AGE son substratos competitivos para la enzima desaturasa (Δ6), que tiene gran afinidad por el ácido α-linolénico. Yao et al., vieron que alterando el ratio de los ácidos grasos n-6:n-3 en dietas de cerdas en lactación influía sobre la concentración de inmunoglobulinas en el calostro de la cerda y en el plasma de lechones. Incrementar la disponibilidad de ácidos grasos n-3 puede hacer decrecer la producción de ácido araquidónico, derivados eicosanoides como la prostaglandina E2, lo cual puede tener un impacto negativo en la producción de inmunoglobulinas. Por lo que se sugiere que el ratio de ácidos grasos n-6:n-3 es sumamente importante en la respuesta inmune de cerdas en lactación y en lechones.

3. PRUEBAS CON PRODUCTO COMERCIAL DE NUTRION

Se llevaron a cabo diferentes pruebas con el producto, basado en mezcla de aceites de pesca- do en forma sólida, lo que facilita el manejo y aumenta su estabilidad frente a la oxidación. Las principales características del producto son su alta proporción de grasa bruta (>80%, 85% con glicerina), y su contenido (7%) de calcio, que puede ser utilizado por el animal eficientemente. Se trabajó una composición uniforme en todos los lotes. Dado que se trata de una mezcla de aceites se puede garantizar un perfil concreto de EPA y DHA.

3.1. Prueba en Pre-Starter de Lechones.

Diseño Experimental
MATERIAS PRIMAS FORMULA PRUEBA FORMULA CONTROL Análisis Nutricional %
Trigo 25 25 Proteína, % 18,1
Maíz 19,4 19,4 Lisina, % 1,39
Hna Soja 47 18 18 Grasa, % 7,95
Cebada 2C 15 15 Fibra, % 2,73
Núcleo 10% AP s/p 10 10 Cenizas, % 5,03
Manteca 3 5,5 EN, kcal 2608
PRODUCTO COMERCIAL 2,5
L-Lysina HCL 0,51 0,51
Carbonato Cálcico 0,5 0,5
Fosfato Bicálcico 0,5 0,5
Cloruro Sódico 0,34 0,34
L- Treonina 0,13 0,13
DL Metionina 0,12 0,12
Control Prueba Diferencia
Inicio prueba 25/05/2017 25/05/2017
Fin prueba 11/06/2017 11/06/2017
Días Prueba 16 16
Edad, días 42 42
No lechones 265 265
Consumo Prestarter (kg) 6,34 6,45 0,11
Peso inicial PO (kg) 7,38 7,35
Peso final P1 (kg) 12,18 12,58
KG Repuestos 4,8 5,23 0,430
GMD (kg) 0,300 0,327 8%
CMD (kg) 0,396 0,403 2%
IC 1,32 1,23 -7%
Costo pienso Prestarter (€/tn) 498,58 515,85
Costo kg carne (€/kg) 0,66 0,64 -0,02

 

CONCLUSIONES

El presente trabajo muestra que suplementar lípidos mejora la ingesta calórica en cerdas en lactación, lo que mejora la producción de grasa láctea y la tasa de crecimiento de la camada. Lo que es más importante, esta suplementación de lípidos dio como resultado una notable mejoría en el retorno al estro después del destete, el mantenimiento de la gestación y el consiguiente tamaño de camada, en el subsiguiente ciclo reproductivo. Suplementar AGE durante la lactación corrige un balance negativo de AGE y esto mejoró la fertilidad de la cerda moderna; un fenómeno que parece ser cada vez más importante con el avance de la edad de la cerda.

Los programas de alimentación para la cerda moderna en lactación, deben estar diseñados para una ingesta dietética mínima de ácido α-linolénico, simultáneo con un mínimo de ácido linoleico; logrando así una máxima eficacia reproductiva de la cerda a través de mecanismos que incluyen el retorno rápido al estro, mantenimiento de la gestación y un gran tamaño de camada en cerdas maduras en el subsiguiente ciclo reproductivo, que parecen ser especialmente susceptibles a deficiencia de AGE.

El producto comercial ha mostrado ser efectivo tanto para los parámetros productivos de la camada (como se ha visto en la prueba aquí presentada), así como en el rendimiento reproductivo de la cerda gestante y lactante (se verá en un trabajo posterior).

ALFREDO J. ESCRIBANO. DVM, PHD.
Head of Business Development NUTRION Internacional
www.nutrion.es
[email protected]

Artículo publicado en Los Porcicultores y su Entorno Enero-Febrero 2019

Fernando Puga
Fernando Pugahttps://bmeditores.mx/
Editor en BM Editores, empresa editorial líder en información especializada para la Porcicultura, Avicultura y Ganadería.
×
BM Editores We would like to show you notifications for the latest news and updates.
Descartar
Permitir Las Notificaciones