Desaparecen en el mundo razas bovinas

Redacción BM Editores.

En el mundo son cada vez más las razas bovinas que han desaparecido o se han extinguido, pero lo peor, otras están en camino de dejar de existir. Mientras la vaca Ñata de Argentina y Uruguay ya se extinguió, otras como la Gloucester en Reino Unido y las criollas en Colombia están en riesgo de desaparecer, reportó la Corporación Británica de Radiodifusión (BBC).

La raza más antigua de vacas lecheras británicas está en riesgo de extinguirse porque hay apenas 27 ejemplares. En el resto del mundo, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), ya han desaparecido alrededor de 90 razas bovinas, precisa la BBC.

La organización Rare Breed Survival Trust (RBST), una beneficencia que comenzó a monitorear y promover razas nativas en 1973, reveló que el inventario de ganado Gloucester en Reino Unido se había reducido a la mitad entre 2006 y 2020, pasando de 54 a solo 27.

Este tipo de ganado se remonta al siglo XIII y su leche se utiliza para producir quesos como el Single Gloucester. La raza también se utilizó en los experimentos de viruela de 1796 de Edward Jenner.

Charles Martell, ganadero y quesero británico de 75 años, reveló que ha mantenido un hato de más de 20 reses Gloucester desde 1972, produciendo quesos como Stinking Bishop y Single Gloucester, respaldado con un estatus de producto con denominación de origen.

Molesto a la que consideró una afrenta, señaló que cuando conduce por el condado para ver otras razas, éstas no pertenecen ahí. “Si todo el mundo tuviera vacas Gloucester, la raza mejoraría enormemente y la gente tendría más para elegir”, expresó el productor ubicado en Dymock, Inglaterra.

Agregó que la raza Gloucester alimentada con pasto tiene un uso más amplio que las vacas Holstein de granjas intensivas que a menudo se alimentan con maíz y dan una gran cantidad de leche. Aunque lamentó la caída del inventario, aseguró que no estaba sorprendido.

Así como Martell, en el mundo hay ganaderos y organizaciones que se han encargado de proteger los recursos genéticos autóctonos. Sin embargo, estos esfuerzos se quedan cortos y las razas desaparecen.

En Argentina y Uruguay, una de las más famosas es la vaca Ñata o Niata, que fue estudiada por el reconocido naturalista Charles Darwin en la década de 1830, cuando visitó la Pampa Argentina y vio al extraño animal, quedando fascinado por su anatomía y especialmente por la peculiar forma de su cabeza.

Darwin lo describió de una forma muy especial, distinta, con respecto a los demás vacunos, lo que hizo resaltar las características de esta raza de la región.

La vaca Ñata ahora está extinta, pero todavía hay un número limitado de esqueletos en algunas colecciones en todo el mundo. Un equipo australiano y suizo estudió la anatomía de esta raza con herramientas que no estaban disponibles en la época de Darwin.

Los hallazgos que encontraron fueron reveladores. En primer lugar, descubrieron que la variedad ahora extinta era una raza única y, a diferencia de algunos bulldogs, no sufría problemas respiratorios o de alimentación debido a su peculiar anatomía.

Ahora también sabemos que la Niata era una raza taurina, única entre el ganado debido a su hocico corto y su mordida inferior, una anatomía que dio lugar a diferencias en el funcionamiento de algunos mecanismos de alimentación.

De acuerdo con la lista de razas desaparecidas de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés), en Brasil desaparecieron 16 clases de ganado vacuno, más que en cualquier otro país de América.

Entre ellas, están el Angola (cruce de cebú probablemente africano y Curraleiro en el siglo XIX), el Javanés (mezcla de cebú Gris y bovino local, desaparecido en la mitad del siglo XIX), la Santa Gabriela (una raza experimental abandonada) o el Southern criollo de origen portugués.

Según el organismo, la lista, aunque mundial, es incompleta, pues Hall y Ruane (1993) por ejemplo, sugieren que al menos 618 razas han desaparecido en el mundo.

La organización continúa explicando que “la presión ejercida por el hombre y por los nuevos ambientes durante la domesticación de las especies animales ha sido la principal responsable de la aparición de variabilidad genética inter-razas y de la formación de muchas razas únicas”.

Entre las razones por las cuales estas variedades están desapareciendo, no solo están las presiones humanas que provocan una pérdida de diversidad, sino que además se superponen también, a menudo, con las catástrofes naturales.

Pero hay otras razones por las que las razas bovinas están desapareciendo, como el poner el acento a una característica o producto específico, como la cantidad de la leche; los cruzamientos indiscriminados; la ausencia de estímulo comercial en el uso de las antiguas razas; las fallas en el equipo de congelación donde están congeladas las muestras, semen o embriones, los cambios tecnológicos, el uso de biotecnologías como la inseminación artificial y la transferencia de embriones, que pueden estimular el reemplazo de razas locales por otras de alta producción; la agitación, las guerras y otras inestabilidades políticas de una región y las catástrofes naturales.

En Colombia, las razas criollas bovinas han sido relegadas por otras variedades extranjeras tanto cebuinas como taurinas. Entre las causas de este desplazamiento, podría hablarse de un cruce indiscriminado o la ausencia de estímulo comercial de los recursos autóctonos.

La FAO concluye que las clases de animales que no están en riesgo o estado vulnerado a desaparecer son aquellas con presencia de al menos 15 mil reses y más de 2000 hembras por región, lo cual no se cumpliría en el caso de los bovinos colombianos.

×
BM Editores We would like to show you notifications for the latest news and updates.
Descartar
Permitir Las Notificaciones