Redacción BM Editores.
La influenza aviar es una enfermedad causada por virus clasificados en múltiples subtipos cuyas características genéticas evolucionan con gran rapidez; en 1996 el virus H5N1 se identificó por primera ocasión en China; en el 2020, surgieron virus H5N1 del clado 2.3.4.4b de Influenza Aviar Altamente Patógena (IAAP) que se propagaron por África, Asia y Europa; en el 2021, llegó a América del Norte a finales del año y en el otoño del 2022, continuó su expansión hacia América del Sur.
Para mediados del 2023 la variante había afectado a más de 58.7 millones de aves en los Estados Unidos; entre octubre de 2021 y diciembre de 2022, Europa sacrificó 50 millones de aves en los establecimientos afectados.
En México, el brote de H5N1 inició el 9 de octubre del 2022 en el Estado de México y el último caso se detectó el 21 de marzo de 2023 en Jalisco; el total de aves afectadas en nuestro país equivale al 1% del inventario avícola nacional; durante el brote se registraron en total 56 casos en 13 estados de la República Mexicana, en donde Jalisco y Yucatán fueron los más afectados.
En granjas afectadas se aplicó cuarentena, sacrificio de las aves y disposición sanitaria de los cadáveres; limpieza y desinfección de las instalaciones, material y equipo; implementación de un periodo de vacío sanitario e introducción de aves centinelas. Rastreo epidemiológico en las zonas perifocales.
En la avicultura comercial se confirmó el H5N1 en 32 granjas, con una población afectada de 6 millones 494 mil 565 aves; en la de traspatio el H5N1 se confirmó en 8 predios con una estimación de 14 mil 725 aves afectadas.
Es importante mencionar que la línea del tiempo en México inició en 1993, con la presencia del H5N2; en 1994 muta; en 1995 se erradica; en el 2006 se presenta el H7N3; en 2012 la H7N7 y en el 2022 la H5N1; de enero a junio de 2023, se mantuvo activo el DINESA en todo el país.
Cabe señalar que los hospederos susceptibles y transmisión se produjo a través de aves silvestres, de corral, humanos (en menor proporción), mamíferos (cerdos, caballos, perros, gatos, etc.), mamíferos marinos (ballenas, focas, etc.); las aves acuáticas como el pato son el reservorio natural del virus de la Influenza tipo A. El virus se transmite por contacto directo entre aves infectadas y aves susceptibles, por excreciones nasales, orales, conjuntivales y de la cloaca.
Los síntomas que se presentan son la baja en la producción de huevo y cascarón blando; escurrimiento nasal, estornudos coloración púrpura en cresta y barbilla; plumaje erizado, temblores, falta de apetito, diarrea y fiebre.
Cabe mencionar que algunas medidas implementadas en el Dispositivo Nacional de Emergencia en Sanidad Animal (DINESA) para el control del brote de IAAP H5N1, fueron entre otras: acciones de vigilancia epidemiológica como promoción de la notificación, capacitación y atención de casos sospechosos; autorización de la aplicación de vacunas de emergencia (más de 200 millones de dosis autorizadas); restricción en la movilización de aves de larga vida, productos y subproductos de alto riesgo y obligatoriedad de la obtención del certificado en medidas de bioseguridad en unidades de producción avícola.
