Redacción BM Editores.
La Dirección General de Salud Animal (DGSA) del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) levantó la cuarentena interna a la avicultura de Yucatán, luego de constatar que el virus de influenza aviar de alta patogenicidad AH5N1 ya no circula en la región.
El retiro de la cuarentena en Yucatán es el cuarto que autoriza la DGSA, desde la primera detección del virus en México, a mediados de octubre de 2022; durante más de tres meses, el Senasica estableció el control de la movilización de productos avícolas procedentes de las entidades afectadas por el virus, para evitar su dispersión, garantizar el flujo de productos para el abasto nacional y dar certeza a los consumidores.
El organismo sanitario informó que con el retiro de la última cuarentena actualmente no hay focos activos del virus AH5N1 en unidades de producción avícola (UPA) del territorio nacional, luego del levantamiento de las medidas restrictivas en Nuevo León, el 23 de noviembre; en Jalisco, el 4 de enero, y el 16 de enero en Sonora.
No obstante, subrayó que, con el objetivo de prevenir nuevos casos que pudieran poner en riesgo la avicultura nacional, el Senasica mantiene las medidas establecidas en el Dispositivo Nacional de Emergencia de Sanidad Animal (Dinesa) y la vacunación de gallinas progenitoras, reproductoras y de postura comercial, en zonas estratégicas.
De acuerdo con el muestreo que han realizado médicos veterinarios especializados de la Comisión México-Estados Unidos para la Prevención de la Fiebre Aftosa y otras Enfermedades Exóticas de los Animales (CPA) perteneciente a la DGSA del Senasica se cumplieron 28 días del último caso positivo de IAAP AH5N1 en Yucatán, por lo que al no detectarse nuevas infecciones durante cuatro periodos de incubación del virus -lapso establecido para garantizar la ausencia de la enfermedad-, se determinó levantar la cuarentena.
Los especialistas de sanidad animal lograron contener el virus en 15 granjas comerciales y dos unidades de producción de traspatio, las cuales fueron despobladas, lavadas y desinfectadas, además establecieron el vacío sanitario de 21 días y, finalmente, mediante pruebas de laboratorio, constataron que ya no hay presencia del virus.
Durante la cuarentena interna, especialistas del Grupo Estatal de Emergencia de Sanidad Animal en Yucatán (GEESA-Yucatán) y Dinesa llevaron a cabo acciones de rastreo epidemiológico con el objetivo de identificar nuevos casos en 27 municipios de la entidad.
Los integrantes del GEESA, comandados por especialistas de la CPA de la región, realizaron 453 investigaciones oficiales, en las que colectaron 17 mil 625 muestras de aves en granjas comerciales, producciones de traspatio y aves silvestres, las cuales fueron analizadas en laboratorios oficiales del Senasica.
La movilización de aves vivas, productos y subproductos estuvo restringida durante este periodo y para autorizar la movilización y comercialización el Senasica debía contar con pruebas de RT-PCR negativas al virus de influenza aviar, con el propósito de evitar la diseminación del virus y proteger a los consumidores.
El organismo subrayó que la estrategia de vacunación contra la influenza aviar AH5N1 ha sido una herramienta determinante para el control del brote a nivel nacional.
Hasta el momento, el Senasica ha autorizado la aplicación de más de 174 millones de dosis del biológico en granjas comerciales ubicadas en zonas de alto riesgo zoosanitario y en UPA donde existen gallinas progenitoras, reproductoras y de postura comercial. Cabe precisar que el 10 por ciento de estas dosis se destinaron a unidades de producción de Yucatán.
La DGSA del Senasica informó que, de continuar la situación epidemiológica actual, mantendrá la vacunación estratégica hasta que termine la temporada invernal (a finales de marzo), con el objetivo de evitar que la enfermedad se establezca en el territorio nacional, lo que implicaría perder el estatus de país libre de IAAP AH5N1.
Precisó que la vacunación de emergencia es una herramienta complementaria, considerada por la Organización Mundial de la Sanidad Animal (OMSA), por lo que, para controlar brotes, se aplica junto con los programas de bioseguridad y control que se deben implementar en las unidades de producción, como limpieza, desinfección y vacío sanitario, además del tratamiento térmico de las excretas de las aves, toda vez que el riesgo es permanente por la migración de aves acuáticas, como patos y gansos, que son reservorios del virus de influenza aviar.
La presencia del nuevo virus IAAP H5N1 representó un reto para Agricultura y la industria avícola del país, no obstante, gracias a las decisiones tomadas en conjunto con los avicultores y autoridades estatales, se ha podido contener la diseminación de la enfermedad.
Cabe señalar que el riesgo de reaparición de brotes, es permanente por la migración de las aves acuáticas, como patos y gansos, que son reservorios del virus de la influenza aviar, por lo cual instó a los productores avícolas a no bajar la guardia.
De octubre a la fecha, Senasica confirmó 50 casos positivos en 13 estados de la República: Aguascalientes, Baja California, Chiapas, Chihuahua, Estado de México, Jalisco, Michoacán, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Sonora, Tamaulipas y Yucatán, con un total de 5.9 millones de aves afectadas, lo que significó menos del 0.3 por ciento de la producción avícola nacional.