Redacción BM Editores.
La secretaria del Departamento de Agricultura (USDA) de Estados Unidos, Brooke L. Rollins, envió una carta de extrañamiento el pasado 26 de abril a su homólogo de México, Julio Berdegué Sacristán en el que le expresa su preocupación ante el avance del Gusano Barrenador del Ganado (GBG) y de no tomar las medidas correspondientes para que ya no avance y se pueda controlar en los estados del sureste de México, entre ellos Chiapas, Campeche y Tabasco, entre otros de esa región.
En la misiva que hizo llegar a través de la embajada de México en ese país señala que no se pueden permitir el lujo de seguir operando de manera parcial; la situación, dijo, requiere atención inmediata y una coordinación decisiva al más alto nivel del gobierno mexicano, de lo contrario, antes del miércoles 30 de abril, restringirán las importaciones de productos de origen animal, que consisten en ganado vacuno, bisonte y equino vivos originarios o en tránsito, para proteger los intereses de la industria agropecuaria de Estados Unidos.
Instó al funcionario mexicano a tomar medidas inmediatas, entre ellas, que la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), tenga una estrecha coordinación con su dirección General de Aduanas y otras entidades federales mexicanas relevantes para facilitar la autorización operativa de la empresa Dynamic Aviation, operadas por el USDA, durante un mínimo de un año o por tiempo indefinido, parala dispersión de mosca estéril en la región mexicana afectada.
Estas aeronaves están equipadas de manera única para llevar a cabo los vuelos de alto volumen, lanzamientos aéreos de precisión necesarios para suprimir y eliminar la población del GBG; la incapacidad de que cualquiera de estos proveedores opere compromete completamente la integridad de la estrategia regional.
Señala en la carta que las autoridades de aviación en México han impuesto restricciones a Dynamic Aviation que parecen inconsistentes con una campaña exitosa y coordinada. En un primer momento, han limitado la dinámica a volar bajo un permiso temporal de 60 días, emitido a través de un acuerdo con la firma mexicana Mubarqui, lo que no da la seguridad necesaria de que las actividades actuales puedan ser sostenidas.
Además, han limitado a Dynamic Aviation a volar solo 6 días a la semana, mientras que el éxito de la operación requiere vuelos constantes los 7 días, incluido el vuelo directo, permisos, acreditación de pilotos, el acceso a instalaciones y el control total sobre sus servicios logísticos, técnicos y de operaciones.
Expresa que recientemente le informaron que las autoridades aduaneras mexicanas están imponiendo aranceles de importación sustanciales en equipos de dispersión y envíos de moscas estériles. Esto a pesar del hecho de que todos los materiales y operaciones están siendo financiados en su totalidad por el gobierno de Estados Unidos con el objetivo de detener la propagación hacia todo el territorio mexicano del GBG.
Los esfuerzos oficiales para detener esta plaga y los costos no solo interrumpen las operaciones, sino que corren el riesgo de retrasar el despliegue de las aeronaves en el momento preciso en el que más se necesita una acción rápida.
Propuso en su escrito convocar a una reunión de estrategia de dispersión aérea para controlar y combatir el GBG entre Estados Unidos y México con participación de ambos gobiernos, con la participación de expertos y técnicos para garantizar una estrategia rápida y sostenida.
Urgió a su homólogo Berdegué Sacristán a tomar estas medidas de manera urgente, e incluso, lo antes posible para que se tomen acciones conjuntas sin más demora.