Alejandro Córdova Izquierdo
Departamento de Producción Agrícola y Animal.
Universidad Autónoma Metropolitana Unidad Xochimilco,
[email protected]
A. Emmanuel Iglesias Reyes.
Departamento de Producción Agrícola y Animal.
Universidad Autónoma Metropolitana Unidad Xochimilco,
[email protected]
INTRODUCCIÓN
La eficiencia reproductiva de las empresas porcinas puede medirse o estimarse a través de los parámetros de producción, y el que se usa en mayor medida para esto es el número de cerdos destetados por hembra por año (Trolliet, 2005).
Aunque algunos reportes señalan que las granjas tipo Norteamérica producen entre 14 y 16 cerdos destetados por cerda por año, en nuestro país, granjas con adecuados sistemas de producción, niveles de tecnificación, estado de salud y genética logran entre 19 y 21; sin embargo también se han reportado que algunas unidades de producción logran obtener 25 (Campabadal, 2007). Este parámetro es producto de la interacción de otros, que son partos por hembra por año, promedio de nacidos vivos y porcentaje de mortalidad en lactancia y de uno o varios elementos. Entre los factores que pueden modificarles se encuentran: origen genético, ambiental, alimentario, sanitario y manejo reproductivo; de ahí que haya que tomarlos en cuenta para hacer una evaluación productiva en granja (Martínez, 2009).
El desempeño reproductivo de las cerdas depende de una disposición compleja de interacciones ambientales y proceso fisiológicos, que se acentúan aún más en zonas bajo condiciones tropicales, ya que aunado a lo anterior, la cantidad o variabilidad de factores climáticos son de gran importancia debido a que los cerdos son expuestos a temperaturas muy diferentes a las de su zona termoneutral (Fuentes et al., 2006).
INTERVALO DESTETE – CONCEPCIÓN
En las explotaciones porcinas, se considera al intervalo destete cubrición fértil uno de los aspectos productivos más importantes, de manera que cada día de aumento del mismo supone un incremento de los costos de producción, ya sea por ciclo reproductivo, por lechón destetado o por kilogramo de carne producida.
El intervalo real entre el destete y la próxima concepción está dado por el intervalo promedio desde el destete y la aparición del primer estro o celo y el intervalo primer estro-concepción o servicio efectivo, representado por el número de hembras que no retornan al estro tres semanas después de servidas (Grandía, 2009).
El tiempo que transcurre entre el destete y el servicio efectivo tiene una marcada importancia ya que representa, junto a selección – primera cubrición y destete final.
TASA DE FECUNDACIÓN
En condiciones normales la tasa de fertilización en el cerdo es alta, estando alrededor del 90%. Los fallos en la fertilización se deben fundamentalmente a fallos totales en un número reducido de hembras que retornarán al celo a los 21 días después del servicio.
Uno de los factores más importantes en la tasa de fertilización es el momento de la cubrición o servicio.
La fertilidad como una de las marcas de productividad y de la potencia reproductiva, significa en la hembra la capacidad de producir una descendencia variable en número adecuado y en un período conveniente. En los machos la buena fertilidad se caracteriza por la habilidad o poder de fecundar el máximo número de hembras (Herrera y Conde, 2010).
La fertilidad es considerada el aspecto económico más importante en una explotación, pues todas las funciones de los animales están ligadas a su capacidad reproductora.
DÍAS DESTETE SERVICIO EFECTIVO
Es el periodo en que la cerda es destetada y vuelve efectivamente al nuevo ciclo reproductivo (intervalo destete-servicio fecundante, IDSF). Muchas veces es el principal factor que afecta el número de lechones destetados/cerda/año, por lo que la disminución de los días no productivos es clave para su mejora (Fuentes et al., 2005).
PRIMER SERVICIO A CONCEPCIÓN
En esta etapa se acumulan los días de todas las hembras que fueron servidas y el resultado de estos servicios NO fue parto. Repetidoras, fallos, abortos, etc. Como parámetro tenemos ≥ 3 días en primerizas por hembra por año y ≥ 4 días por hembra por año adultas.
PRIMER SERVICIO A DESCARTE
En esta etapa se acumulan todos los días de las hembras que fueron servidas y el resultado del servicio fue la muerte o descarte. Parámetro ≤ 3 en primerizas por hembra por año y ≤ 4 en adultas por hembra por año (López, 2011).
DESTETE A PRIMER SERVICIO
Aquí se acumulan todos los días de destete a primer servicio. Parámetro ≤15 por cerda por año, recordemos que los mejores celos se dan entre 3 y 6 días postdestete. Se debe evitar demasiado desgaste de las cerdas por mala nutrición, temperatura, agua, etc. (López, 2011).
DESTETE A DESECHO SIN SERVIR
En esta etapa se acumulan todos los días del destete a desecho o muerte del animal sin servir- la. Es el momento más propicio de vender cerdas, generalmente por baja ejecutoria o por viejas, lo más importante es venderlas pronto y no acumular muchas cerdas en esta etapa. Parámetro ≤ 4 días por cerda por año (López, 2011).
PARTOS POR HEMBRA POR AÑOS
Partos/cerda/año: es el número de partos que podemos obtener de la hembra en el período de 365 días. Hace 30 años con un período de Lactancia de 30 días se lograba 1,2 partos por madre, actualmente con la ayuda de una adecuada nutrición, buenas y confortables instalaciones y manejo ajustado a los nuevos genotipos existentes se están obteniendo 2.5 o más partos/madre/año.
Los partos/madre/año, tienen íntima relación con la duración de la Gestación, la duración de la lactancia y el Intervalo Destete Celo.
La duración de la Gestación es un componente Biológico donde la mano del hombre no ha podido modificar, ello va de 114 a 116 días de duración (López, 2011).
La duración de la Lactancia es el período donde la hembra provee de alimento (Leche) a sus lechones y por lo general es de 21 días, aunque en la actualidad los productores europeos están volviendo a una Lactancia de 25 días.
Esta decisión del productor europeo de sacrificar días se debe a que la tasa de repeticiones en hembras que eran destetadas con un promedio de 21 días se hacía cada vez mayor, y ello se debe a que el período de la Involución Uterina debe ser mayor a 19 días.
En la actualidad, existe un consenso general que al reducir el período de Lactancia se presenta una reducción igualmente importante en el número de lechones nacidos. Existen investigaciones donde se demuestra que el tamaño de la camada fue menor en hembras con períodos de lactancia inferiores a 17 días (Sales, 2010).
El Intervalo Destete-Celo, está sometido a una serie de aspectos donde intervienen:
- El Intervalo Destete-Celo.
- Intervalo Celo-Servicio efectivo o concepción.
Este aspecto tiene gran importancia en los días no productivos en las cerdas (DNP). Igualmente, ese intervalo actúa sobre los resultados en las cubriciones, ya que un intervalo superior a los 7 días impacta sobre las cubricio- nes que se han presupuesto para la semana o mes.
El intervalo destete celo nos sirve para monitorear la calidad de alimentación que esa hembra tuvo en la sala de maternidad y en el manejo del recelo que se efectúa en la granja.
Existen una serie de factores a tener en cuenta en el Intervalo Destete-Celo, los cuales influyen negativamente en él, estos son:
- Consumo inadecuado de alimento durante la lactancia.
- Temperatura de la sala de maternidad.
- Época del año.
- Duración de la lactación inferior a 17 días. (López, 2011).
RETRASO DE LA PUBERTAD EN MULTÍPARAS
El aumento de la temperatura retrasa la aparición de la madurez sexual. Ello está ligado, en parte, a una velocidad de crecimiento limitada, por el bajo nivel de ingestión de alimento. La mayoría de los autores coinciden en que la pubertad de las cerdas se retrasa en verano. A medida que los días se hacen más largos se acorta la edad de la pubertad. De tal manera que las hembras nacidas en primavera manifiestan la pubertad más tempranamente que las nacidas en otras estaciones. Esta relación parece estar influida por la glándula pineal, a través de la mayor o menor síntesis de melanina (Sales, 2010).
Por otra parte, se ha observado que las altas temperaturas influyen en una disminución de la secreción de gonadotropinas, con lo que ello también contribuiría a un retraso en la aparición de la pubertad.
PROLONGACIÓN INTERVALO DESTETE-CELO
En los meses de verano los intervalos destete-ovocitación, destete-celo y destete-cubrición fértil son de mayor duración que en el resto del año. Este alargamiento del intervalo destete-celo es más prolongado en las cerdas aloja- das en jaula que en las alojadas en grupos. Por otra parte, se incrementa el porcentaje de anoestros, como consecuencia de una falta de actividad ovárica que facilita la no salida en celo de la cerda.
La estación del año también ejerce una cierta influencia sobre la duración del celo, se comprobó cómo las cerdas destetadas en verano presentaban un celo y un intervalo estro-ovulación 8 horas más largo que las cerdas destetadas en primavera; observándose un descenso lineal de la duración del celo y del intervalo estro-ovulación asociado al aumento del intervalo destete-celo. La explicación a este fenómeno la podríamos encontrar, en parte, en las altas temperaturas que provocan una reducción del consumo de los alimentos en las cerdas lactantes, llegando al destete en una condición corporal muy pobre, lo que retrasaría la aparición del celo post-destete. Además, los síntomas del celo son menos aparentes y los niveles de 17 b-estradiol más bajos al comienzo del celo (López, 2011).
Sin embargo, cuando las altas temperaturas del verano son contrarrestadas mediante prácticas de manejo, no se aprecian diferencias significativas según la época del año. Se ha realizado una experiencia en el noroeste español, en la cual realizaban dos riegos diarios (en las horas más calurosas del día) con manguera a los animales e instalaciones, para mitigar las altas temperaturas durante los meses de junio a septiembre.
DISMINUCIÓN DE FERTILIDAD
Existe una variación de la fertilidad de la cerda a lo largo del año, apreciándose cómo el porcentaje de fertilidad es más bajo en los meses de verano y otoño, entre un 7 y un 9% si se compara con la media del año (Sales, 2010).
El problema de la fertilidad se manifiesta como un retorno al celo diferido después de la cubrición y un incremento del número de cerdas que quedan vacías, lo que provoca un aumento del número de repeticiones cíclicas (López, 2011).
Todo ello repercute en un aumento de los días improductivos por cerda y año.
En este caso el verraco también juega un papel protagonista, ya que los eyaculados recogidos durante el verano y principio del otoño tienen un menor volumen y una concentración espermática menor que los recogidos en el invierno y la primavera. Los cambios en el fotoperiodo influyen en la producción espermática, mientras que las altas temperaturas tienen un efecto destructor directo sobre las células germinales. Se necesitan, al menos, 5 semanas para que la motilidad espermática alcance valores normales tras la exposición del verraco al estrés térmico. Debido a ello las altas temperaturas del verano pueden provocar la infertilidad en los verracos a comienzo del otoño, intensificando de este modo la infertilidad estacional de las cerdas.
AUMENTO DE LAS PÉRDIDAS EMBRIONARIAS TEMPRANAS
En los meses de otoño se detecta una menor tasa de partos como consecuencia del aumento de pérdidas de gestación temprana que se traduce en un aumento del número de repeticiones acíclicas, como consecuencia de la muerte embrionaria.
Las cerdas suelen retornar al celo el día 25 y 35 post- inseminación. Parece ser que la segunda ola de estrógenos embrionarios, necesaria pa
a mantener la gestación, que tiene lugar hacia el día 19 de la fecundación es muy baja en estas cerdas. Además los bajos niveles de progesterona en sangre que se producen en otoño pueden provocar la imposibilidad de mantener la gestación (Carlino et al., 2007)
Asimismo, la prolificidad de las gestaciones llevadas a término disminuye como consecuencia de la menor viabilidad de los embriones
BIBLIOGRAFIA
1. Campabadal C., 2007. Alimentación de la cerda gestante, Asociación Americana de Soya Latino América.
2. Carlino C. G., S., Torno, H.A., Fonseca R., Cyngiser, A. G. E., Napolí, A., Miguez, M., 2007. Comportamiento de ciertos parámetros reproductivos en cerdas de diferentes números de partos., Fac.Cs.Vet., UBA, Buenos Aires.Área de Producción de Porcinos y Área de Economía., Revista Argentina de Producción Animal. Vol. 27 Supl. 1: 249-282.
3. Fuentes C. M., Pérez G. L., Suárez H. Y., Soca P. M., 2006. Características reproductivas de la cerda. Influencia de algunos factores ambientales y nutricionales. Facultad de Medicina Veterinaria, Universidad Agraria de La Habana.”Fructuoso Rodríguez Pérez”, Departamento de Prevención, Revista Electrónica de Veterinaria REDVET ISSN 1695-7504.
4. Grandía T. J., 2009. Efecto de las altas temperaturas en las cerdas portal (Resumen), Veterinaria Albéitar, Agro-test-control.
5. Herrera P. M. A., Conde M. P. 2010. Control artificial del celo en ganado porcino. Veterinarios Kubus, S.A. Revista Firma Ganadera.
6. López P. M., 2011. Parámetros reproductivos porcinos: influencia del cambio climático (Tesis nivel licenciatura). Universidad Veracruzana, Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia.
7. Martínez G. R. G., 2009. Principales factores que afectan la reproducción en el cerdo. Departamento de Producción Animal: Cerdos, Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, Universidad Nacional Autónoma de México, Ciudad Universitaria, México, D.F.
8. Sales M. M., 2010. Influencia de la estacionalidad en la prolificidad de la cerda ibérica en régimen extensivo. Universidad de Córdoba.
9. Trolliet C. J., 2005. Productividad numérica de la cerda factores y componentes que la afectan (Cátedra de Producción Porcina), Facultad de Agronomía y Veterinaria, Universidad Nacional de Río Cuarto.
Artículo publicado en Los Porcicultores y su Entorno