Margarita Trujano
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El monitoreo en rastro, donde se examinan órganos específicos, es una práctica común y universal en Dinamarca, Canadá, Australia, EEUU y Holanda. Estos países han desarrollado un sistema que inspecciona las patologías de cerdos, lo que ha permitido determinar el seguimiento geográfico y estacional de las patologías, la variación en las prevalencias y la influencia del manejo e instalaciones en los problemas productivos observado1,2. En ningún momento debe esta práctica reemplazar las visitas a granja, exámenes clínicos y necropsias, por el contrario esto deberá ser un suplemento.
Una ventaja es que una gran variedad de enfermedades pueden ser evaluadas en los rastros. Se pueden determinar niveles de neumonía, rinitis atrófica, manchas de leche en hígado, úlcera gástrica, fallas reproductivas, sarna, ileítis etc.3,4,5. También permite detectar la presencia de enfermedades subclínicas y sirve para monitorear la efectividad de las estrategias de control o tratamiento utilizadas en la explotación5,6. Los resultados pueden emplearse para planear estrategias de control o prevención de enfermedades, son de gran importancia sobre todo si se observan lesiones o enfermedades que no se sabía que estaban presentes. La mayoría de las enfermedades que afectan el desempeño de los cerdos en engorda no les ocasiona signología clínica. En la mayoría de cerdos con neumonía se observa anorexia, depresión, tos, estornudo, etc. Sin embargo, algunos de los animales afectados no presentan signología, pero su desarrollo no es el normal. Es por lo tanto difícil de distinguir este tipo de animales de los completamente sanos.
Se deberá planear: el número de lotes a evaluar, frecuencia de evaluaciones, número de cerdos por lote, y metodología empleada.
Los hallazgos de tejido de resolución, puede dar una idea de la edad a la cual los animales fueron infectados; si una lesión que se sabe que no dura más de 8 semanas y se encuentra en rastro, entonces la infección ocurrió en crecimiento-finalización. Tomando en cuenta que el hallazgo de lesiones en rastro es susceptible a la variación generada por la regeneración del tejido se presenta el Cuadro 1, donde se menciona el tiempo que implica el periodo de regeneración para las enfermedades que comúnmente evaluamos. El más importante de estos detalles, es que está demostrado que en los casos que el periodo entre el episodio de la enfermedad y el examen es largo, digamos mayor a 8-10 semanas, existe la probabilidad de que las lesiones ya no estén presentes.
La inspección de tejidos ya sea en Rastro o en necropsias realizadas en animales retrasados, se favorece de la aplicación de un sistema de calificación determinado previamente y que se usa en cada inspección. Existe un sistema diseñado por Pointon et al (1999) que en Australia es conocido como el Sistema de Monitoreo de Salud Porcina o PHMS (por sus siglas en Inglés), y en Estados Unidos se conoce como PigMon. Para la aplicación de este sistema se ha realizado una selección de puntos u órganos a revisar, y se ha determinado un sistema de calificación para cada una de las lesiones o alteraciones a evaluar.
En visitas que se realizan a granjas el examen de lesiones en forma macroscópica es uno de los procedimientos que pueden reportar más utilidad. Una buena alternativa es establecer una rutina de hacer exámenes postmortem en animales retrasados. Es necesario hacer énfasis que los animales examinados sean retrasados y no de los que mueren en los corrales. El examen postmortem ya sea en rastro o de animales retrasados puede ser complementado con exámenes histopatológicos de los órganos afectados, se colectan durante el examen y se fijan en formol al 10% para ser examinadas posteriormente. El apoyo que brinda el examen histopatológico es de gran utilidad ya que rara vez vamos a encontrar lesiones macroscópicas que nos indiquen en forma irrefutable la presencia de diferentes agentes, pero en el examen microscópico sí existe manera de confirmar o descartar la participación de diferentes etiologías.
Objetivo:
El objetivo del presente trabajo es compartir el desarrollo de un Sistema de evaluación que utiliza como base el PigMon con ciertas variantes. Este sistema se ha utilizado en diferentes rastros de México desde hace 10 años. La metodología se divide en dos partes: La primera basada en PigMon, donde se evalúa, neumonía, rinitis atrófica, manchas de leche en hígado, dermatitis e ileítis. La segunda en que se revisa (pulmón, hígado, riñones, tracto reproductor, tracto digestivo, bazo). En la segunda parte se identifican enfermedades y patologías no respiratorias debidas a agentes bacterianos, virales, nutricionales y/o tóxicos, a las que se les atribuye la capacidad de producir disminución del bienestar animal y de eficiencia de producción, y que en ocasiones no son diagnosticadas o son subestimadas en la granja y/o en el monitoreo de animales terminados. Los datos se vacían en una hoja de cálculo y los reportes se entregan por separado, dando en cada una diagnósticos, sugerencias y comentarios.
TAMAÑO DE LA MUESTRA
Una de las preguntas más comunes es: ¿Cuál es el tamaño de muestra apropiado que se requiere para obtener información confiable? El procedimiento para determinar esto está basado en la estadística y en niveles de confiabilidad. La selección del número de animales a revisar de cada envío depende de la población total del sitio a evaluar y la prevalencia de la enfermedad. El objetivo de establecer un tamaño de muestra es detectar al menos a un animal con lesiones aun en una baja prevalencia de la enfermedad.
La consideración más importante en la utilización de la ecuación es que el tamaño de muestra aumenta cuando nosotros disminuimos el rango en el que está la auténtica prevalencia. En el caso de una enfermedad de la que sabemos poco y arbitrariamente determinamos que la auténtica prevalencia estará en un rango de +10% en relación a la prevalencia calculada se requieren 57 animales en la muestra. Pero si consideramos que la mayoría de los padecimientos que son susceptibles a evaluar por medio de la inspección en animales muertos son conocidos, se recomienda usar aproximadamente 30 animales. En una granja pequeña que tiene de 200 a 499 animales se estará revisando un número superior al indicado pero eso no debe representar problema alguno. En todo caso el problema surge cuando se revisan menos de los indicados.
Como regla general en las inspecciones de rastro que efectuamos se examinan 45 animales por granja que es un buen número para ser revisado y poder así conocer la prevalencia.
METODOLOGÍA
En el Cuadro 2 se presenta la hoja de captura que se utiliza en rastro. Presenta dos divisiones una relacionada con PigMon y la otra con lesiones diversas, incluyendo las relacionadas con Micotoxinas.
En la parte que corresponde a PigMon se revisan lesiones de Micoplasma agudo, Micoplasma crónico, Pleuritis, Neumonía Intersticial, APP Agudo y APP Crónico.
En la segunda parte se examinan órganos con lesiones de enfermedades diversas incluyendo micotoxinas. Los órganos examinados son: Pulmón, Higado, Riñón, Tracto Digestivo, Tracto Reproductor, Bazo.
PULMONES
De todos los elementos a revisar indiscutiblemente uno de los que aporta más información es el pulmón, vale la pena tener bien claro el sistema de calificación que se debe aplicar al estimar la extensión o severidad de las lesiones. Para lograr esto se asigna un valor porcentual a cada lóbulo pulmonar donde los lóbulos diafragmáticos o caudales son equivalentes al 25% del pulmón cada uno y los otros lóbulos apicales, cardiacos y accesorio tienen un valor de 10% cada uno (Fig. 1). La suma del valor de los siete lóbulos es igual al 100% de área de pulmón. Cuando un lóbulo ej.: el apical derecho, está afectado en su totalidad y el cardíaco derecho está afectado en una área correspondiente a unas dos quintas partes, o dicho de otro modo un 40%, tenemos que ese pulmón en global tendrá un grado de lesión o de severidad del 14%. Este valor del 14% surge de la adición del 10% de afectación que significa la totalidad del lóbulo apical y la proporción de afectación que presentó el lóbulo accesorio. En una inspección de rastro o cuando se hacen necropsias en la granja en forma rutinaria se colectan valores de varios pulmones y se hace un promedio de los valores de afectación.
Las lesiones neumónicas son más duras que el tejido sano. Son de color rosa obscuro a rojo. La cantidad de tejido afectado varía. Pueden confundirse con coloraciones por inhalación de sangre o agua.
La calificación de lesiones debe tomar en cuenta la consistencia del tejido, el color que en ocasiones se observa en pulmones de cerdo puede ser tan variado que provoca confusión. En ocasiones el pulmón está bastante lejos del color rosado que se considera normal pero la presencia de manchas o áreas de coloración café o rojo intenso no necesariamente implica que exista lesión. Las lesiones que sí deben de ser consideradas y calificadas son la consolidación y la necrosis de tejido. En el caso de la primera, la consolidación también es llamada hepatización ya que la zona afectada del pulmón presenta aspecto y consistencia similares a las del hígado (Fig. 2). Estas zonas al tacto están duras. Las lesiones de necrosis, por otro lado, son identificadas por la fragilidad del tejido que se parte entre los dedos cuando es manipulado (Fig. 3).
En la hoja de control existen dos columnas una Mico Aguda y otra Mico Crónica, en el caso de lesiones de consolidación o hepatización es conveniente hacer una anotación relativa a si estas lesiones son recientes o son viejas. Los términos que se utilizan para diferenciar una de la otra es hepatización roja y hepatización gris, lo cual indica que será el color de la lesión lo que nos permita conocer si es una lesión reciente o vieja. Las lesiones se consideran activas si hay exudado, se verifica por la apariencia y textura de los pulmones afectados. La inflamación aguda muestra tejido inflamado y aumentado. Por otro lado las lesiones pulmonares crónicas presentan atelectasia cicatrices disminución de tamaño. Las lesiones microscópicas de este tipo de lesiones, principalmente las ocasionadas por Micoplasma, permanecen aún en pulmones con aspecto normal. En la hoja de control la primera columna es de Mico Aguda, en ésta se coloca el porcentaje total de hepatización aguda observada en el pulmón. Por ejemplo si existe 10% se escribe el número en la columna de Mico Agudo. En la columna de Mico Crónico se escribe también el porcentaje total de lesión crónica. En algunos casos llega a ocurrir que el pulmón tiene lesiones viejas y lesiones recientes, en estos casos es necesario anotar el % aproximado de cada uno de estos dos tipos de lesión en la columna correspondiente. Las lesiones debidas a esta bacteria persisten por 6-8 semanas, pero hay reportes que indican que pueden observarse hasta por 37 semanas. Las lesiones presentes en cerdos de 8 semanas, pueden haber desaparecido cuando son examinados al rastro. En infecciones secundarias, las infecciones pueden durar hasta 16 semanas.
PLEURONEUMONÍA CONTAGIOSA PORCINA (APP)
Las lesiones de necrosis (Fig. 3) están comúnmente asociadas a la infección con Actinobacillus pleuropneumoniae y la enfermedad causada por este agente se conoce como Pleuroneumonía Contagiosa Porcina (APP). Esta enfermedad afecta el desempeño de los animales.
En brotes la mortalidad puede llegar a 30-40% en destetes y engorda. Se observan áreas hemorrágicas, necróticas, pleuritis fibrinosa, especialmente en la parte dorsal del pulmón. Las lesiones son elevadas, es importante cortarlos y corroborar que no se trata de abscesos. En casos crónicos hay cavidades, orificios donde antes había tejido vivo.
En la hoja de control existen dos columnas para APP; la primera es APP Agudo, en el cual predomina la necrosis y otra columna APP Crónico en el cual se observa pleuritis, adherencias y zonas cavernosas en tejido pulmonar con necrosis y tejido de reparación. Se examina la lesión y se sigue el método de calificación utilizado para las lesiones de Mico Agudo y Crónico. Se escribe en la hoja de control el porcentaje de pulmón afectado. Al igual que en Micoplasma es posible observar lesiones agudas y crónicas en el mismo pulmón.
PLEURITIS
La pleura que es la membrana que cubre los pulmones y las costillas y permite el libre movimiento de los pulmones y costillas. Cuando se infecta parte de la pleura se adhiere entre sí. En la hoja de control existe una columna: PLEURITIS. La inflamación de la pleura frecuentemente es una manifestación más del proceso que en forma genérica designamos como neumonía. Sin embargo, vale la pena que se determine en forma específica la presencia o ausencia de esta lesión y además que se aplique una calificación propia como indicativo de la severidad.
La existencia de adherencias ya sea entre los lóbulos pulmonares o de los lóbulos a la pared torácica es una de las formas más comunes de pleuritis. En ocasiones esta pleuritis o adherencias son de consistencia tan fuerte que impiden que los pulmones sean retirados de la cavidad abdominal. Cuando se intenta retirar los pulmones, éstos se desgarran, quedando una parte adherida a la pared de la cavidad. En otras ocasiones la pleuritis se manifiesta como una capa de fibrina que cubre los lóbulos pulmonares, esta capa puede ser del grosor de un vendaje de gasa que inclusive puede ser separado y levantado de la superficie del pulmón. Esta membrana o pseudomembrana de fibrina puede ser de color amarillo o rojizo o incluso incolora.
En esta columna se califica con 1 cuando la pleuritis es leve o moderada (Fig. 4) y Pleuritis 2, existen severas adhesiones entre lóbulos pulmonares, cuando el pulmón es desprendido de las canales, mucho de este tejido se queda adherido a las paredes de cavidad torácica (Fig. 5).
Las adherencias por Micoplasma que se diagnostican en base a su aspecto macroscópico, localización y prevalencia, pueden sanar en un periodo de 8 a 12 semanas, en tanto las lesiones por APP tardan de 10-12 semanas en sanar.
NEUMONÍA INTERSTICIAL
En otra columna de la hoja de control corresponde a NEUMONIA INTERSTICIAL (Fig. 6), debido a la dificultad para calificar esta lesión, que aun cuando está presente no se aprecia la extensión o profundidad de la lesión. En la columna correspondiente sólo se anota su presencia = 1.
EVALUACIÓN DE LESIONES EN OTROS ÓRGANOS
En la parte correspondiente a PigMon, se examinan otras cosas además de las afecciones del aparato respiratorio profundo; presencia de manchas de leche en hígado, la existencia de lesiones sugestivas de ileitis, el grado de rinitis y la presencia de lesiones asociadas con dermatitis papular. Al mismo tiempo en la hoja de evaluación se pueden incluir algunos otros parámetros que son proporcionados, cuando están disponibles por el rastro, tal como son el valor de grasa dorsal en mm, el porcentaje de rendimiento de la canal y el grado que se asignó a la canal.
HÍGADO: Cuando un cerdo ingiere un huevecillo de parásitos redondos, va al intestino y la larva viaja hacia el torrente sanguíneo. Pasa por el hígado en su camino
hacia los pulmones y deja una serie de cicatrices blanquecinas redondas llamadas “Manchas de Leche”. Una vez en los pulmones, tose el animal y la larva es deglutida y se desarrolla en el intestino delgado.
Las lesiones observadas con mayor frecuencia son: Manchas de leche, la forma de evaluación es: 0= Higado normal sin manchas de leche, 1= existen de 1 a 10 manchas de leche y 2= existen >10 manchas de leche. Es importante recordar que las manchas de leche
son lesiones bien delimitadas y generalmente de forma redondeada (Fig. 7). No deben confundirse con lesiones de tipo estriado o difuso. La ausencia de manchas de leche no es garantía absoluta de libre de infección por Áscaris suum. Las manchas desarrolladas en una infección pueden desaparecer en 3 -5 semanas, pero en cerdos que se infestan constantemente, estas lesiones persisten por más tiempo. Las manchas de leche no indican que necesariamente haya parásitos en intestino, pero sí nos da una idea del problema en el hato.
ILEITIS
INTESTINO DELGADO: Esta enfermedad afecta los últimos 30 cm del intestino delgado. Ocasiona en los animales de engorda diarreas en casos severos hay diarrea con sangre y muerte de los animales. Después de un brote puede no observase lesiones en rastro, ya que los animales que sobreviven tienden a sanar en tres semanas. La inflamación del Ileum o ileitis puede ser revisada simplemente por palpación pero se requiere una gran práctica para evaluar correctamente la existencia de la lesión, en ocasiones se aprecia edema ligero en el mesenterio. Lo más recomendable es hacer un corte a lo largo del Ileum iniciando en el punto donde el termina el Ileum y en dirección al Yeyuno. Cuando se cuenta con las condiciones para hacer este corte se debe de hacer de cuando menos 30 cm. Se usa una calificación numérica donde 0 es ausencia de lesión, 1 es lesión leve y 2 es lesión severa. Es recomendable tomar muestras de ileums sospechosos para histopatología para confirmar la presencia de le enfermedad. La adenomatosis se cura de 4-6 semanas después de su aparición. Tal y como ocurre con muchas otras lesiones existe un proceso de recuperación (Cuadro 1).
DERMATITIS
PIEL: La causa principal de dermatitis en cerdos en rastro es Sarna causada por Sarcoptes. Los cerdos de engorda desarrollan una reacción de hipersensibilidad (alergia) a los parásitos que se observan como pequeños nódulos en piel.
Para calificar el grado de dermatitis papular es necesario revisar la canal después del pelado, es conveniente ayudarse de una fuente de luz ya que las lesiones no siempre están de color brillante. Se revisará la piel por posibles pequeñas pápulas eritematosas sugestivas de reacción de hipersensibilidad. Las casusas de estas lesiones son diversas, piquetes de mosquitos, moscas, piojos, pero Sarcoptes scabei variedad suis es el más común. Miden aproximadamente .3 cm de diámetro y se observan en cabeza y piernas traseras. En casos severos se extiende a flancos y espalda. El valor que se aplica estará de acuerdo con la cantidad de lesiones que se encuentren en la canal y como en todos los casos 0 será equivalente a ausencia de lesión. El diagrama que se presenta en la figura 8 resulta de utilidad para determinar la calificación.
CORNETES NASALES: Para determinar el grado de rinitis atrófica que existe en la población se realizan cortes de la nariz a la altura del primer molar de forma tal de dejar expuestos los cornetes. El sistema de calificación es el sistema ideado por el Dr. Jack Done que fue uno de los pioneros en el ejercicio de cuantificar el daño producido. El sistema usa valores del 0 al 5, donde 0 es el valor correspondiente a cornetes normales no lesionados. El valor 1 se aplica a casos donde uno de los cornetes usualmente de los ventrales está ligeramente atrofiado, de tal manera que el espacio entre el piso de la cavidad y el cornete está aumentado. El valor 2 es cuando esta alteración moderada del tamaño del cornete se observa en los dos cornetes ventrales. El valor 3 se aplica cuando uno o ambos de los cornetes ventrales están totalmente atrofiados de forma tal que el espacio para entrada de aire está notablemente aumentado de tamaño. El valor 4 se aplica cuando la atrofia de cornetes involucra a todo un lado, esta alteración es común que vaya acompañada de una desviación en el septo nasal (Fig. 9). El grado 5 o máximo es cuando hay ausencia total de cornetes debido a la atrofia total de los mismos. Esta situación puede ir acompañada, pero no necesariamente se observa siempre, de una notable desviación del septo nasal.
En la hoja de control de lesiones a rastro se incluyeron los valores de estas lesiones. En pulmón para la evaluación de edema y debido a que en las lesiones de tipo edematosos no es fácil hacer un estimado de la extensión de tejido que está afectada se les dio un valor de 1 para lesiones moderadas y 2 para lesiones severas (Fig.10).(Edema entre los lóbulos pulmonares o en el mediastino). Coloración amarillenta del pulmón valor 1.
Se evalúa su ubicación, interlobular o en mediastino. Se toman muestras de histopatología para saber si se relaciona con un problema infeccioso como Circovirus o bien de intoxicación como Fumonisina.
HÍGADO
Se debe revisar la presencia de quistes, cicatrices, necrosis, fibrosis, degeneración, cambios de coloración, etc. En la hoja de control en la segunda parte donde se evalúa el hígado las lesiones son: Fibroso, Manchas Bancas (no las típicas ocasionadas por migración larvaria), Manchas rojas, Amarillo, Friable. Para la evaluación de cada una de estas alteraciones, se examinan uno a uno los 4 lóbulos del hígado, el valor depende del número de lóbulos afectados: 0= Higado normal 1= si un lóbulo está afectado 2= si dos lóbulos están afectados 3= Si tres lóbulos están afectados y 4= cuando todos los lóbulos están afectados. En el caso de coloración amarillenta si está presente se le dará un valor de 1. Rara vez aunque no imposible se pueden observar lesiones de hepatosis dietética en cerdos en rastro. Se pueden observar además lesiones debidas a intoxicaciones por micotoxinas en el alimento, en este caso los higados se observan amarillos, disminuidos o aumentados de tamaño, duros al tacto, con manchas blanquecinas difusas. Todas las lesiones macroscópicas pueden tener diferentes etiologías, por lo que es importante examinar cortes de hígado al microscopio para establecer la causa real de estas lesiones (Fig. 11).
ESTÓMAGO: Se revisa la presencia de: úlceras, erosiones, reacción linfoide, tipo de alimento. La región Pars esofagea es la de mayor interés y en ella se revisa la extensión de la hiperqueratosis. En general la presencia de estas lesiones se relaciona con el tipo y calidad de alimento consumido así como con situaciones de estrés. En la hoja de control sólo se anota: 1 si está presente alguna de estas patologías (Fig. 12).
INTESTINO GRUESO: Los cambios que se pueden observar son: Peritonitis focal (engrosamiento de la túnica serosa), puede deberse a inflamación local. En casos de disentería crónica algunos cerdos que lleguen a rastro mostrarán edema en mesocolon y engrosamiento de la serosa. En la hoja de control se revisa la presencia de alimento sin digerir, se escribe 1 en caso de que exista. El análisis de histopatología sirve para corroborar la presencia de lesiones específicas.
RIÑONES: Nefritis o inflamación de los riñones, usualmente es ocasionada por Leptospirosis. Leptospira causa aborto o mortinatos cuando infecta primerizas o cerdas gestantes. En cerdos de engorda se presenta, pero no es una enfermedad significativa. En humanos es un problema serio de salud ya que vía orina puede pasar de cerdos a humanos. La inspección de riñones incluye; evidencia de Nefritis Intersticial, fibrosis perirenal, coloración, aumento de tamaño e infartos. Nefritis intersticial se observa como focos blanquecinos de .1 a 1 cm de diámetro distribuidos difusamente en el parénquima renal. Estas lesiones indican infecciones previas con Leptospiras. Las lesiones pueden estar presentes hasta por 4 meses. Es conveniente quitar la cápsula para observar bien el parénquima. Los quistes observados en riñones se relacionan con intoxicaciones con micotoxinas.
En la hoja de cálculo las lesiones a evaluar son (Fig. 13): Manchas blanquecinas irregulares, Manchas rojizas irregulares, presencia de quistes, aumento de tamaño, coloración amarilla, infartos. A la presencia de manchas rojizas y blanquecinas, se les dará un valor de =1 si se observan de 1 a 10 y un valor de =2 si existen >10. En caso de observar riñones con coloración amarillenta se dará un valor =1. Si el riñón está aumentado de tamaño se dará un valor =1. En caso de quistes dependiendo del tamaño y la cantidad de éstos se dará un valor de =1 en caso de que exista uno pequeño y un valor =2 si existen quistes grandes y en mayor cantidad. Si existen infartos rojos o blancos sólo se le dará valor de 1. Para corroborar éste y todos los demás tipos de lesiones es necesario tomar muestras para histopatología, ya que no todas las manchas blanquecinas contienen leptospiras y no todas las leptospiras se manifiestan como manchas blanquecinas. En el reporte se comenta acerca de todas las diferentes lesiones y cuáles pueden ser las etiologías posibles.
TRACTO REPRODUCTIVO: Se examina el útero, grosor, coloración, se corta una porción para ver si hay exudado o líquidos en gran cantidad en el Lumen. Si existe hidrómetra se le da valor = 1. En ovarios se observan algunas anomalías; Quistes luéticos, foliculares, corpórea lútea,se les da valor de 1. Es importante revisar este tipo de alteraciones ya que en casos de baja fertilidad, podemos tener una mejor idea si el problema es de tipo infeccioso o más bien un desbalance hormonal (Fig. 14).
BAZO: Además de los órganos descritos se examinan de forma cualitativa alteraciones en Bazos (Disminución o aumento de Tamaño, blanquecino, infartos (Fig. 15)).
Los bazos disminuidos pueden relacionarse con procesos de inmunosupresión, en tanto los bazos aumentados indican procesos septicémicos. Estas evaluaciones permiten junto con todos los otros órganos examinados tener una idea más clara de la situación en la granja.
PIEL
Recientemente existen lesiones en piel distribuidas en la región perianal de coloración rojiza brillante a rojiza azulosa relacionadas con infecciones asociadas a Circovirus porcino 2. También se revisa por posibles lesiones en piel ocasionadas por E. rhusiopathiae. En casos de septicemia, la canal tendrá eritema distribuido de forma difuso y la canal es regularmente decomisada
CONSIDERACIONES PRÁCTICAS
Es conveniente que nuestra hoja de control corresponda a una hoja de cálculo en la cual podemos vaciar las calificaciones de las lesiones observadas en una muestra de la población y de una forma rápida tengamos los valores totales para todas las columnas así como el número de animales afectados con cada una de las lesiones, el número de animales en cada una de las categorías para cada lesión y el promedio de los valores en el caso de áreas de consolidación. La periodicidad de estos análisis es otro elemento que debe conocerse para lograr el mayor provecho posible de la información que se deriva de los mismos. Hay que considerar que algunos padecimientos tienen cierta estacionalidad en la presentación de su manifestación máxima como puede ser el caso de la aparición de manchas de leche que es considerablemente más común en verano que en invierno y el caso contrario sería las lesiones de dermatitis papular asociadas con sarna. Cuando el propósito único de la inspección es tener un panorama general de la condición de salud de la población se puede considerar que 2 ó 3 inspecciones al año será suficientes, sin embargo, lo más útil es cuando se hace una o dos revisiones de reconocimiento y posteriormente se establece un programa de medidas encaminadas a mejorar la salud y por ende la productividad de la operación y como parte de ese programa se determina la periodicidad de los exámenes.
En la Figura 16 se muestra un ejemplo de las gráficas incluidas en el reporte final.
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Artículo publicado en “Los Porcicultores y su Entorno“