Francisco Alejandro Alonso Pesado
Depto. Economía, Administración
y Desarrollo Rural
Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia
Universidad Nacional Autónoma de México
Elizabeth Rodríguez de Jesús
Departamento de Economía,
Administración y Desarrollo Rural
Facultad de Medicina Veterinaria
y Zootecnia
Universidad Nacional Autónoma de México.
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Introducción
Las naciones del orbe cada vez están más interrelacionadas en aspectos económicos, sociales, políticos y culturales, de tal manera que ningún país está ajeno a los cambios que se suceden en otros. Asimismo la formación de bloques económicos regionales han impulsado el comercio no sin afectar estructuras productivas y de transformación al interior de países como México(1).
Por lo anterior se viene presentando un acelerado cambio de paradigma que contempla las siguientes variables: economía abierta, visión a largo plazo, orientación hacia mercados, enfoque al entorno, énfasis global, competencia en calidad, elevada competencia de oferta, consideración de nichos de mercado, protección al medio ambiente e interés por la ecología, mayor exigencia de los clientes, un alto nivel tecnológico y un mayor valor agregado a los productos perecederos. Estos cambios vienen propiciando una mejor racionalidad y optimización en el aprovechamiento de recursos en un intercambio mundial, dadas las enormes facilidades que aportan los muy diversos medios de comunicación, las tecnologías modernas de conservación y transporte. En estos aspectos siempre cabe una administración bien planeada y ejecutada(1).
En la actualidad no se puede concebir al sector primario (y a la avicultura) sin las cada vez más estrechas relaciones con el sector secundario y terciario, es decir un mayor aporte de insumos industriales y servicios para ofrecer productos agropecuarios y avícolas con características demandadas por el consumidor.
En México, a partir de los primeros años de la década de los 80’s, el subsector pecuario viene presentando problemas no solamente coyunturales sino también estructurales; destacando incongruencias entre políticas macroeconómicas, enormes desarticulaciones entre la producción y el consumo, escasos efectos multiplicadores al interior de algunos sectores productivos pecuarios, desfasamientos entre el subsector pecuario y los demás sectores de la economía, relaciones desfavorables para el subsector pecuario provocando drenajes de excedentes hacia los otros sectores, escaso y caro capital para el subsector pecuario, escasa inversión pública de fomento a la producción pecuaria, estancamiento en programas de extensionismo, escasos recursos para una mejor utilización del agua, capacitación a productores para mejorar alternativas de producción, así como fortalecer y desarrollar la investigación pecuaria de acuerdo a las condiciones y necesidades del país(1).
Ante este panorama se requiere entre otros aspectos llevar a cabo una administración pecuaria incluyendo a la avicultura eficaz y eficiente con el fin de hacer un uso racional de los recursos y así aumentar la productividad de las empresas pecuarias y avícolas(1).
La administración establece al proceso administrativo el cual constituye un proceso de toma de decisiones en el que los recursos escasos disponibles económicos se asignan a diversas alternativas de producción para organizar y operar un negocio de manera tal que se alcancen los objetivos.
En el proceso administrativo se distinguen dos fases denominadas fase mecánica y fase dinámica. La fase mecánica (etapa de preparación) contempla a la planeación, organización y la fase dinámica, (que es la etapa operativa de acción de la empresa) incluye a la integración, dirección y control(1).
Ante una apertura comercial con el socio más poderoso del mundo (Estados Unidos de América) en la mayoría de las ramas de producción pecuaria, se requiere llevar a cabo, entre otras cosas, un proceso administrativo riguroso para hacer un uso racional de los recursos, tomar las decisiones más adecuadas y obtener parámetros económicos deseables(1).
En el diagnóstico se requiere, entre otros aspectos, del análisis del entorno externo para formular correctamente: visión, misión, objetivos y metas, además llevar a cabo adecuados esquemas de organización, así como establecer una integración, dirección y control que repercuta en los mejores resultados económicos.
En la práctica las fases de la administración se llevan a cabo de forma simultánea en las empresas y éstas contribuyen de forma sinérgica al logro de objetivos(1).
Sin embargo, y esto se debe recalcar, que aun con una eficiente administración en las empresas pecuarias nacionales y buenos resultados económicos, el subsector pecuario y la avicultura se encuentran en desventaja con otros productores de otros países, en virtud de los enormes apoyos directos e indirectos que reciben éstos de su gobierno, impactando a la planta productiva pecuaria y avícola nacional, quebrando empresas, dejándose de generar empleos directos e indirectos, disminuyendo los efectos multiplicadores y agudizando balanzas comerciales desfavorables(1).
Ante este contexto el objetivo del trabajo es establecer la importancia de la planeación en las empresas avícolas.
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Material y métodos
Para desarrollar el tema “La importancia de la planeación en la empresa avícola”, se consultaron fuentes de información secundaria, obteniéndose así los datos necesarios, mismos que se seleccionaron, se ordenaron y se presentaron.
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Desarrollo del tema
La planeación de la empresa avícola.
En todo negocio avícola la administración es un elemento esencial que hasta hace poco tenía un enfoque hacia adentro de la organización. Sin embargo, al ir cambiando el entorno de los negocios avícolas, las reglas del juego se modificaron. Ahora la administración tiene que ver no sólo con lo interno de la granja sino también con el entorno externo nacional e internacional para poder competir y sobrevivir en un mundo altamente globalizado. Por otro lado nuevas teorías de pensamiento del área aparecen e incluyen aspectos tan relevantes como la excelencia, calidad total, innovación empresarial, creatividad, reingeniería de los negocios, benchmarking, filosofía, valores y humanismo. Al interior de toda empresa avícola se presenta un proceso continuo de toma de decisiones, mediante el cual los escasos recursos económicos son asignados a diversas alternativas económicas buscando lo óptimo para alcanzar los objetivos propuestos.
El proceso administrativo incluye varias fases, etapas o funciones administrativas, mismas que están presentes simultáneamente y retroalimentándose. Estas funciones son: la planeación, la organización, la integración, la dirección y el control(1).
3.1. Planeación
La planeación es esencial para que las otras funciones se lleven a cabo al interior de la empresa avícola y a su vez las otras funciones bien llevadas facilitan la planeación.
Hay diversas definiciones de planeación. Una de ellas es: “la función que tiene por objetivo fijar el curso concreto de acción que se sigue, estableciendo los principios de orientación, el tiempo y el número de eventos para llevarla a cabo. Identifica las oportunidades de mejoramiento de operación de la empresa avícola con base en la técnica, así como el establecimiento de planes, programas y proyectos para el aprovechamiento integral de las oportunidades para conseguir los objetivos definidos”.
Algunos autores establecen que la planeación es un proceso que inicia con un diagnóstico cuyo fin es de fijar objetivos, definir estrategias, políticas, planes y proyectos para alcanzar metas. Asimismo, la planeación establece la organización que llevará a cabo en la práctica las decisiones tomadas; contempla también un continuo seguimiento del rendimiento de los recursos limitados y la retroalimentación para iniciar un nuevo ciclo y redefinir objetivos, metas, estrategias, políticas, programas y proyectos(1).
Al interior de una empresa avícola la planeación permite optimizar el nivel de producción de huevo para plato y carne de pollo, a través del manejo adecuado de los recursos materiales, financieros, naturales y humanos, y del conocimiento del mercado.
El administrador que planea se pregunta: ¿Qué se quiere hacer en la planta avícola? ¿Qué se va a hacer con ella? ¿Cómo se va hacer? ¿Cuándo se va hacer? ¿Qué cursos de acción deben tomarse?(1).
Como se aprecia, tiene que ver con decisiones a futuro y se debe trabajar con el respaldo de objetivos para determinar las respuestas a las preguntas previamente establecidas(1).
La planeación no elimina riesgos, pero trata de preverlos, anticiparlos y minimizarlos; prepara al avicultor ante las contingencias internas y externas, permite proyectar ordenadamente las actividades para lograr los objetivos y metas.
Es importante establecer que un diagnóstico llevado cuidadosamente, es la clave central para desarrollar el proceso de planeación correctamente(1).
3.2. Pasos a seguir en la planeación
Los siguientes incisos deben ser considerados por el administrador para efectuar el proceso de planeación:
a) ¿Dónde se encuentra la empresa avícola en este momento? (Diagnóstico).
b) ¿Cuáles son las fuerzas, debilidades, amenazas y oportunidades que enfrenta la empresa avícola?
c) ¿Qué sucederá si no se hacen cambios?
d) ¿A dónde se quiere llegar?
e) ¿Cuál será el ambiente externo dentro del cual la unidad de producción avícola operará?
f) ¿Quién hará qué?
g) ¿Cuándo será hecho?(1)
3.3. Identificación del proceso de planeación
En la planeación existen elementos claves para su implementación, mismos que a continuación se describen.
3.3.1. Filosofía
Las personas que laboran en las empresas avícolas se encuentran en un ambiente social, donde interactúan entre sí y con las del entorno, conformando una filosofía propia ajustada por los valores y por la manera de relacionarse con la sociedad. El establecer la filosofía que normará a la empresa, implica fijar la responsabilidad del negocio para con cada persona de la empresa y del entorno, y viceversa la responsabilidad de cada persona que labora para la empresa y para la sociedad. Esto significa un compromiso de la empresa para con la sociedad.
En la actualidad cualquier negocio avícola para sobrevivir y tener éxito requiere, aparte de seguir las leyes económicas y administrativas, de un sólido conjunto de valores sobre los cuales deberá establecer estrategias y políticas(1).
3.3.2. Misión
La misión refleja el propósito de la empresa y determina el porqué de su existencia.
Una misión bien establecida constituye una excelente guía para la unidad de producción en lo referente a su supervivencia, continuidad, crecimiento y desarrollo.
Para establecer una misión se requiere previamente de un exhaustivo diagnóstico.
Identificar la misión es especificar el compromiso que el negocio avícola tiene con la sociedad, es delimitar las actividades y la manera en que el gerente y el empleado deben llevar a cabo esas actividades.
Cuando no se tiene clara la misión de la granja los gerentes pueden establecer planes tentadores que exigen cualidades que no posee la unidad de producción y que se traduce en desperdicios de recursos y desmotivación de los integrantes de la empresa avícola.
Como ejemplo de la misión de una empresa avícola es: “Producir alimentos (huevo para plato y carne de ave) con un alto valor nutritivo, frescos e higiénicos que satisfagan las necesidades del consumidor a un precio razonable; así como desarrollar integralmente a las personas de la empresa avícola capaces de adquirir nuevos conocimientos y brindar un servicio especializado para beneficio de los consumidores de la región donde se ubica la granja”.
Para producir alimentos higiénicos, frescos y con alto valor nutritivo se requiere realizar con excelencia todas las tareas que se llevan a cabo desde la producción, pasando por la transformación hasta colocar el producto ya sea con el intermediario o para el consumidor final a nivel de anaquel. La misión antes expresada contempla el desarrollo pleno y armónico de las capacidades, habilidades manuales y cognoscitivas; además de los valores de las personas que trabajan en el negocio avícola con un enfoque humano, a través de un continuo proceso educativo(1).
3.3.3. Visión
Es un término que describe de cómo se quiere ver en el futuro la organización económica, qué se quiere de la empresa en el porvenir, en qué nuevas líneas de producción participará, cuáles son las actividades que se eliminarán, cuáles mantendrá. A partir de la visión es posible elaborar un plan estratégico, ya que permite fijar objetivos y metas. El tiempo puede variar de seis meses hasta cinco años.
En la visión se establecen escenarios, uno de éstos: “será una unidad de producción avícola con productos de alta calidad nutritiva, con precios razonables para el consumidor, vinculada con su entorno y socialmente comprometida. La granja será centro de referencia de cambios tecnológicos. Será una empresa donde los gerentes, administradores, contadores, médicos veterinarios, supervisores, caseteros y en general todo el personal trabajarán en un ambiente de respeto, transparencia y armonía participando responsablemente para el logro de objetivos y metas”(1).
3.3.4. Valores
Una de las definiciones de valores dice que: “son las preferencias, los criterios o las elecciones de conducta personal o grupal, los cuales se manifiestan en un conjunto de actitudes en torno a una concepción de lo que es deseable”.
El estudio de los valores es fundamental para el estudio de la dirección. Los valores afectan las percepciones tanto de los fines apropiados, como de los medios adecuados para alcanzar dichos fines.
Los sistemas de valores tienden a ser persuasivos en el diseño y desarrollo de estructuras y procesos de las organizaciones, el empleo de estilos particulares de liderazgo, así como la evaluación del desempeño de los subordinados (decidir qué acciones correctivas tomar y cuándo aplicarlas).
En la empresa avícola se deben perseguir valores como: Integridad, respeto, generosidad, equidad, solidaridad, responsabilidad, calidad, veracidad, honestidad, transparencia, etcétera.
La filosofía, la misión, la visión y los valores están fuertemente interrelacionados(1).
3.4. Objetivos
Los objetivos surgen de la pregunta ¿a dónde quiere llegar la empresa? Los objetivos son mesurables (medibles) a corto plazo. Así como las metas se desprenden de la misión de la empresa avícola, los objetivos derivan de las metas.
Los objetivos pueden considerarse bajo tres enfoques: los sociales, impuestos por la organización, los de los integrantes de la organización y los del sistema.
Los objetivos deben ser accesibles y compatibles con la realidad de la empresa, también deben ser viables y estar en conformidad con la cantidad de recursos que la unidad de producción tiene y con los que se le proporcionarán. Asimismo éstos deben ser verdaderos desafíos de acuerdo con la época en que se vive.
La participación responsable del personal de la granja avícola en la formulación de objetivos es una práctica deseable, además y en lo posible, deben ser consensuados.
Algunos objetivos en las empresas avícolas son: aumentar la producción en un 5%; mejorar el índice de conversión en un 2%; disminuir la mortalidad en un 2%; incrementar el índice de productividad en un 1.5%; disminuir los robos de insumos en un 3%; aumentar en un 5% los cursos de capacitación a los encargados y en un 10% a los médicos veterinarios zootecnistas, contadores y administradores de la empresa, entre otros(1).
3.5. Metas
Los estados o las condiciones futuras que determinan el cumplimiento de la misión son las metas. Las metas son por naturaleza más concretas y específicas que la misión. Es factible que un consorcio avícola cuente con varias metas que contribuyan al logro de la misión.
Es clave que se lleve a cabo un diagnóstico amplio y profundo para fijar metas, objetivos, estrategias, políticas, planes, programas y proyectos. Para establecer metas se requiere también de personal preparado que interactúe en la granja avícola. Este personal debe comunicarse y conocer los planes de acción que están involucrados para el logro de las metas. En el proceso continuo de establecimiento de metas se requiere de una revisión periódica y, en su caso, adaptarlas a las nuevas condiciones o modificarlas.
Las metas son guías que dan a las unidades de producción avícolas dirección; tienden a proporcionar estabilidad a los consecuentes ejercicios de planeación y se establecen bajo la perspectiva de futuro de dicha unidad avícola y del entorno externo.
El establecimiento cuidadoso de metas permite hacer un uso racional de los escasos recursos disponibles de las empresas avícolas.
Como ejemplo de metas en un negocio avícola: “incrementar la productividad de kilogramos de carne de pollo en 6% por un año, implementar 6 cursos de capacitación por un semestre a encargados, médicos veterinarios zootecnistas, contadores, administradores y caseteros”(1).
3.6. Políticas
Son planes fijados o guías de acción en áreas especializadas o delimitadas. Las políticas fijan límites y son una herramienta para coordinar y controlar las actividades de planeación en la empresa(1).
3.7. Procedimientos
Son el “cómo hacer” en el proceso de planeación. Describen una serie de labores que señalan el curso de las operaciones, que a su vez, deben mantenerse dentro de los límites señalados por las políticas(1).
3.8. Programas
Son aquellos planes en los que se fijan los objetivos, la secuencia cronológica de operaciones y el tiempo necesario para ejecutar cada una de sus partes(1).
3.9. Análisis de situación
El análisis de situación es esencial en la planeación y se refiere al análisis de información pasada, presente y futura. Hay varias dimensiones del análisis de situación que deben ser consideradas desde un principio.
- a) Existen varias formas de realizarlo.
b) Este es amplio y contempla cualquier variable interna y externa de la empresa avícola.
c) Variará dependiendo de la unidad de producción avícola involucrada en la planeación.
d) El análisis de situación se llevará a cabo continuamente mediante la observación del medio ambiente (interno y externo) por parte de los responsables o directores de área.
e) Los sistemas de información son necesarios para llevar a cabo un programa de actividades en las empresas avícolas para una mejor toma de decisiones. Con esta información se tiene el sustrato para fijar objetivos (de ahí la importancia del diagnóstico)(1).
A la información acumulada en las diferentes áreas de la granja avícola por lo general se le conoce como “análisis de la situación”.
Uno de los objetivos del análisis de situación es el de identificar y analizar las fuerzas, los fenómenos claves y las tendencias que impactan a la empresa avícola. El análisis de situación realiza sistemáticamente la evaluación de los impactos económicos, sociales y políticos del entorno interno y externo(1).
El análisis de situación implica:
I. Decidir sobre una situación problemática (por ejemplo bioseguridad) y qué interesa mejorar.
II. Describir en forma cuidadosa y completa la condición deseada.
III. Identificar las fuerzas impulsadoras y los factores que presionan en dirección contraria a la condición deseada y fuerzas que acercan a dicha condición.
IV. Examinar exhaustivamente cada una de las fuerzas(1).
El retomar información del pasado (ventas, costos, ganancias, rendimiento sobre la inversión, nichos de mercado, participación en el mercado, productividad de los factores productivos, etc.) será útil para evaluar la situación actual de la empresa y ver las posibilidades de desarrollo futuro. A su vez los datos actuales (análisis de mercado y clientes, recursos de la empresa, competencia, tratados, etc.) darán un panorama de las fortalezas, debilidades, oportunidades, (potencialidades) y amenazas. Con base en los resultados, la unidad de producción avícola identificará las oportunidades más sobresalientes y las amenazas más serias a enfrentar(1).
3.10. Planeación estratégica
La planeación estratégica es de suma importancia ya que incluye los aspectos anteriormente vistos; marca el paso que la empresa avícola debe seguir y la proyecta hacia nuevos horizontes (contempla escenarios). Se incursiona en la investigación de campos de experimentación distintos a los tradicionales, disminuye y minimiza el riesgo. Orienta la actividad de la empresa hacia un fin determinado, al establecer objetivos alcanzables que van de acuerdo con las aspiraciones de las empresas y reduce la improvisación. La planeación también demanda de mecanismos de seguimiento, evaluación y control, retroalimentando y estableciendo responsabilidades a los gerentes de cada una de las áreas de la empresa.
La planeación estratégica es un enfoque de sistemas para guiar una empresa durante un tiempo a través del entorno interno y externo con el fin de lograr objetivos y metas previamente establecidas.
Un propósito fundamental de la planeación estratégica consiste en descubrir oportunidades y fortalezas, y por el otro lado las amenazas y las debilidades.
La planeación estratégica va más allá de pronósticos actuales del producto (kilogramos de huevo para plato) y de los mercados presentes, y formula preguntas centrales, algunas de ellas:
a. ¿Se tiene el negocio avícola adecuado?
b. ¿Cuáles son los objetivos básicos?
c. ¿Están aumentando o disminuyendo los mercados o nichos de mercado?
d. ¿Se están volviendo obsoletas las mercancías producidas en la empresa?(1)
También la planeación estratégica cuenta con fases bien definidas, éstas son:
- Formulación de objetivos que deben ser alcanzados. La empresa determina los objetivos globales que pretende alcanzar en el largo plazo, definiendo orden de importancia y prioridad.
- Análisis interno de las fuerzas y limitaciones de la empresa. En este análisis se incluyen puntos fuertes y débiles. Por ejemplo escasa capacitación del personal de trabajo e instalaciones viejas y obsoletas, sin tecnología de punta; o viceversa, granja automatizada con capital humano altamente calificado.
- Análisis externo del medio ambiente. Se refiere a las condiciones externas que le imponen a la empresa avícola riesgos, incertidumbres, oportunidades y desafíos. Tiene que ver con: tipos de cambio, tasas de interés, inversiones productivas estatales, apertura comercial, etc.
- Formulación de alternativas estratégicas. En esta fase se busca formular las estrategias más adecuadas(1).
En el contexto actual en que se encuentran las granjas avícolas (los grandes consorcios, las medianas y pequeñas unidades de producción), “exige” de un análisis profundo, amplio, completo, fuerte y sólido de las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas (FODA), de la planeación estratégica.
Las oportunidades y amenazas se enmarcan en el entorno externo, las fortalezas y debilidades se ubican hacia el entorno interno, sin desconocer que las cuatro se interrelacionan, y se deben ver como todo un sistema que afecta (para bien o para mal) a las unidades de producción avícola.
El entorno externo (nacional e internacional) es tan complicado que no es posible que una sola persona (el gerente, el administrador o el dueño) tenga el suficiente conocimiento para evaluar toda la problemática. Ante esta situación, se requiere de equipos de trabajos multidisciplinarios e interdisciplinarios, para resolver, en la medida de lo posible, los retos que se presentan en las empresas avícolas.
Los grandes consorcios avícolas del país pueden ir superando obstáculos de gran magnitud, ya que además de tener los recursos económicos para contratar recursos humanos de alta calificación en disciplinas como: las finanzas, la contabilidad, la administración, la mercadotecnia, la economía (macroeconomía, microeconomía y comercio internacional), la medicina veterinaria y la zootecnia, presentan posicionamientos en el mercado interno, que les proporcionan ventajas económicas sobre otros competidores.
Las oportunidades, entre algunas de ellas, que se establecen para los avicultores, son: una inflación muy baja, misma que anualizada a agosto de 2015 se ubicó en 2.59 por ciento, el menor nivel de aumento constante y prolongado de los precios al consumidor desde que se iniciara esta medición en 1969. El hecho de una inflación tan baja influye, hasta cierto punto, el mejorar el comportamiento del mercado interno, pudiéndose acelerar la demanda de productos avícolas(2).
Otra oportunidad es el flujo de divisas hacia el país, producto de los envíos (remesas) por parte de los mexicanos, principalmente provenientes de Estados Unidos (EE.UU.), que acumularon de enero a agosto de 2015 una cantidad de 16,577.8 millones de dólares, lo que significó una tasa de crecimiento anual de 6.1 por ciento(3).
Esta variable macroeconómica es una fuente importante de recursos para los hogares mexicanos receptores, principalmente para el consumo y manutención, gana dinamismo y presenta una pendiente positiva(3).
Al convertir las remesas en moneda nacional, el resultado arroja una cifra de 37,479 millones de pesos(3).
El hecho de que familias mexicanas de recursos escasos capten divisas del exterior fortalece, hasta cierto punto, su capacidad para comprar bienes de consumo básicos, incluyendo los avícolas, ricos en proteínas y otros nutrientes.
Otra oportunidad que los avicultores del país pueden aprovechar es la baja de precio en el mercado internacional de insumos alimenticios y otros commodities. La baja del precio obedece a la disminución en el ímpetu de la economía china, se estima que su Producto Interno Bruto (PIB) crezca en 2015 alrededor del 5 por ciento, cifra inferior al 7 por ciento que era la tasa a la que venía creciendo(4).
Se indica que la economía mundial viene creciendo a una tasa del 2 por ciento. Lo anterior obedece al hecho de que lo que va de la presente década, la economía china explica una tercera parte de la tasa de crecimiento de la economía mundial(4). China impulsa el crecimiento de la economía en el mundo en virtud a las tasas muy altas en sus exportaciones e importaciones.
Si disminuye la tasa de crecimiento de sus importaciones el precio en el mercado internacional de éstas baja.
Si los avicultores compran del exterior insumos a precios bajos, sus costos de producción pueden ser competitivos y por lo tanto ampliar sus ganancias.
Es conveniente indicar que hay otras oportunidades, como: campañas para el control y erradicación de enfermedades y posibilidades de ventas en mercados foráneos.
En planeación estratégica del equipo de trabajo de las granjas avícolas, debe estar muy atento a las amenazas, se presentan algunas de ellas:
La raquítica expansión del PBI (se estima que para el 2015 un rango de crecimiento entre el 2.2 y 3.2 por ciento) es una amenaza para la avicultura del país ya que se refleja en un moderado consumo interno, pudiendo estancar el crecimiento de bienes avícolas, afectando a los oferentes en sus ingresos, costos y ganancias(5).
Otra amenaza que presenta el entorno externo es la cotización del dólar con respecto al peso mexicano. Cuando el peso se devalúa frente al dólar, impacta negativamente en el costo de las materias primas traídas del exterior para las actividades avícolas.
Evidentemente esta situación se refleja en el traslado del aumento de precios de las materias primas hacia un incremento de costos de producción, y este incremento hacia una elevación de precios de venta de la carne de ave y huevo, impactando en ingresos de los avicultores, pudiendo colocar en una situación crítica a algunas (muchas o pocas) empresas, en razón a la posibilidad de reducir sus ganancias o caer en zonas de pérdidas por contracción del mercado.
Otra amenaza es la referente al precio del petróleo en el mercado internacional, este precio se ha reducido significativamente llevando a que se considere un precio promedio de 50 dólares el barril de la mezcla mexicana para 2016(6), lo que sumado a la reducción de la plataforma petrolera de exportación implica una caída de los ingresos fiscales derivados del petróleo de 48 por ciento(6).
La caída de ingresos fiscales provoca reducción de recursos para proyectos, algunos de ellos congelándose, dejándose de generar empleos y estancando la dinámica de expansión del mercado interno, por lo tanto se afecta el crecimiento en la compra de bienes de consumo avícola. Las ventas totales captadas por los participantes en el mercado avícola podrían crecer a tasas poco significativas.
Siguiendo con las amenazas para la avicultura, está la tasa de interés. En esta era globalizada de políticas monetarias extraordinariamente expansivas, y en esta coyuntura, la variable más importante en el proceso de toma de decisión del Banco Central (Banco de México, del país) es lo que sucede con las tasas de interés de EEUU(7).
Las posturas monetarias de Banxico (Banco de México) en los próximos meses estará más ligada a lo que haga o deje de hacer la Reserva Federal de los EEUU (Fed), por lo que es previsible que el Banco Central del país mantendrá, hasta ahora la tasa de interés de referencia sin cambios en 3 por ciento(7).
Como es de esperarse, ante el posible aumento de la tasa de interés de EEUU en diciembre de este año, México se verá en la necesidad de elevar su tasa, lo que implica un aumento de costos de producción vía incremento de costos financieros, afectando ganancias de los actores involucrados en avicultura.
Si la Fed eleva su tasa de interés existe la posibilidad de “migración” de capitales de corto plazo (capital de cartera) de México hacia EEUU, presionando al tipo de cambio apreciando al dólar con respecto al peso mexicano. Así mismo una devaluación del peso frente al dólar, implica crecimiento de deuda en pesos, cuando se tienen créditos en dólares, afectando la solvencia económica de los avicultores que precisamente contrataron préstamos en billetes verdes.
Una amenaza de tremenda importancia para el sistema de producción avícola del país es la referente a las barreras no arancelarias por enfermedades avícolas como la Influenza aviar. La presencia de la enfermedad “frena” las probables exportaciones hacia mercados foráneos.
Los avicultores no podrán acceder a esos mercados, y por lo tanto dejarán de percibir dólares, asimismo no captarán valor agregado, se dejarán de crear empleos directos e indirectos, se limitarán efectos multiplicadores, se restringirán desarrollos locales y regionales, además se disminuirá la acumulación, concentración y se limitará la reproducción ampliada del capital.
Existen otras amenazas como: la enorme deuda pública, la inequitativa distribución de la riqueza, y el impresionante número de personas ubicadas en pobres (55.2 millones) y en extrema pobreza (9.3 millones); otra amenaza de enorme importancia es el cambio climático, todas ellas afectan en mayor o menor grado a la avicultura ubicada en el país.
El gerente, el administrador, el dueño o el equipo de trabajo inter o multidisciplinario deben analizar detalladamente el entorno interno con el fin de establecer cuáles son las fortalezas y las debilidades de la empresa avícola.
Algunas de las fortalezas que se pueden encontrar al interior del negocio avícola son: Integraciones verticales y horizontales con economías de escala con un comportamiento descendente de la curva de costo medio a largo plazo; personal altamente capacitado en todos los departamento o áreas de la granja; ambiente de trabajo favorable; innovaciones e invenciones tecnológicas que aumentan la productividad de la empresa y probablemente su rentabilidad; conocimiento amplio del mercado; capacidad de liderazgo; comunicación fluida y transparente entre departamentos, áreas o secciones de la granja; abastecimiento en cantidad, tiempo y lugar de insumos; programas científicos de nutrición, manejo y bioseguridad, y otras muchas fortalezas.
Con referencia a las debilidades, algunas de ellas son: Calendarios de vacunación incorrectos de acuerdo a las condiciones de la granja; escasa o nula capacitación de la fuerza laboral de las diversas áreas; acelerada rotación de personal; duplicidad de funciones; presentación del producto por debajo de los estándares o exigencias del consumidor; falta de control, y por lo tanto desperdicio y robo de recursos; incorrecto almacenaje de las materias primas; presencia importante en las granjas de otras aves, insectos y roedores que transmiten enfermedades y merman la existencia de alimento, siendo el insumo de mayor importancia en costos. Hay muchas otras debilidades en las granjas avícolas que impiden que se alcancen los objetivos y las metas.
3.11. Planeación táctica
La planeación táctica es un proceso continuo mediante el cual se llevan a cabo los planes, tomando en cuenta la escasa cantidad de recursos económicos disponibles y el desarrollo de éstos. Tiene las siguientes características:
- a) Se origina al interior de las orientaciones de la planeación estratégica.
b) Es llevada a cabo por ejecutivos de nivel medio (gerentes divisionales).
c) Se refiere a un área específica de la empresa.
d) Se maneja información externa e interna.
e) Se orienta hacia la coordinación de recursos.
f) Sus principales parámetros son efectividad y eficiencia.
g) La información es analizada, específica y detallada.
h) Se establecen resultados específicos a corto plazo.
i) Produce documentos prácticos que identifican resultados específicos que se lograrán, por lo regular en un año, al igual que las acciones y recursos para obtenerlos(1).
3.12. Algunas diferencias básicas entre planeación estratégica y táctica:
Planeación estratégica Planeación táctica
Alcance de los objetivos Toda la organización Cada departamento
Orientación Largo plazo Corto y mediano plazo
Toma de decisiones Altos niveles de la empresa avícola Gerente departamental de la empresa avícola
En el contexto de un desacelerado crecimiento de la actividad avícola nacional, se exige llevar a cabo al interior del proceso administrativo una planeación en las unidades de producción avícola mucho más eficiente, con el fin de tomar las decisiones más adecuadas y hacer un uso racional de los escasos recursos económicos y de esta manera participar en mejores condiciones en un mercado altamente competitivo. Esto sin dejar de tener en cuenta un escenario internacional de desigualdades y sin dejar de hacer énfasis en establecer reglas de comercio leal y no como el practicado por otros países. Asimismo, la planeación demanda de profesionales y trabajadores altamente capacitados para poder cumplir con objetivos y metas(1).
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Conclusiones
En últimas fechas se aprecia cómo factores externos a las empresas avícolas e incluso al entorno han evolucionado hasta afectar de una manera u otra la estabilidad económica, no únicamente la del país, además de las granjas avícolas y en algunos casos el patrimonio de las unidades de producción.
La fase de planeación en el proceso administrativo es una herramienta muy útil ante la volatilidad de los mercados, disminuyendo riesgos e incertidumbres, aumentando las posibilidades de permanencia de las empresas avícolas en el mercado y así poder ofertar satisfactores avícolas de calidad para nutrir adecuadamente a la población del país.
En la actualidad se requiere de la participación de equipos de trabajo, sobre todo en los grandes consorcios avícolas, para establecer diagnósticos mucho más precisos y así tomar decisiones sobre bases sólidas, y encaminarse a niveles mayores de productividad y rentabilidad.
Como conclusión final, se afirma que la globalización “exige”, entre varios aspectos, llevar a cabo de forma rigurosa el proceso administrativo, incluyendo a la planeación, y así hacer un uso racional de los recursos de las empresas buscando óptimos económicos como: mayor ingreso, mínimo costo y mayores utilidades o ganancias.
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Literatura consultada
5.1.1. Alonso, P.A. et al. Administración Pecuaria: Aves. Universidad Nacional Autónoma de México. Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia. División Sistema Universidad Abierta y Educación a Distancia. 2ª Edición, México, D.F. 2002.
5.1.2. La Jornada. Aumentaron 0.21% precio al consumidor en agosto: INEGI. Año 31. Número 11175. Jueves 10 de septiembre del 2015. México, D.F.
5.1.3. El Economista. Remesas crecen 6.1% al cierre de agosto. Número 6851. Viernes 2 de octubre del 2015. México, D.F.
5.1.4. El Economista. Made in China. Número 6819. Martes 18 de agosto del 2015. México, D.F.
5.1.5. El Economista. PIB habría crecido 0.4% en el II Trimestre. Número 6819. Martes 18 de agosto del 2015. México, D.F.
5.1.6. La Jornada. Delgado, S.O. Los criterios de políticas económicas: ¿metas conseguibles o buenos deseos? Año 31. Número 11175. Jueves 10 de septiembre del 2015. México, D.F.
5.1.7. El Economista. Banxico seguirá esperando a que la Fed se mueva primero. López Doriga, O.J. Número 6845. Jueves 24 de septiembre del 2015. México, D.F.
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