Aldo Bertoni
Adolfo Álvarez-Macías
Diego Armando Morales
José Luis Dávalos
Daniel Mota-Rojas
*El artículo original fue publicado en la revista Journal of Buffalo Science, para mayores detalles consulte Bertoni et al. J. Buffalo Sci. (2022): 11, 8-18 https://doi.org/10.6000/1927-520X.2022.11.02
INTRODUCCIÓN
Unas de las actividades más señaladas como culpables del deterioro ambiental, son la agricultura y la ganadería, por lo que se están buscando nuevas estrategias que permitan alcanzar objetivos múltiples como producir la cantidad y calidad de alimento que demanda la humanidad en periodos cortos, con la menor cantidad de recursos posibles y por supuesto con bajo o nulo impacto ambiental (Antoni et al., 2019).
Tanto la adopción de modelos productivos sustentables, la inclusión de prácticas tecnológicas eficientes y el considerar elementos que interaccionan de manera simbiótica con el ambiente, son algunas de las bases propuestas como potencialmente benéficas para considerar la configuración o rediseño de sistemas de producción agrícola y/o pecuaria, especialmente en sistemas que interaccionan directamente con el ecosistema, tal es el caso de las unidades de producción de doble propósito ubicadas en el trópico húmedo mexicano (Altieri et al., 2012; Bover-Felices and Suárez-Hernández, 2020).
Los búfalos de agua son una especie convenientemente adaptada al medio ambiente tropical húmedo, con características anatómicas, fisiológicas y de comportamiento que le confieren atributos relevantes para ser un elemento eficiente y resiliente del sistema que promueva el aprovechamiento sustentable de los recursos naturales (Bertoni et al., 2019), con baja o nula dependencia de insumos externos y con la capacidad de producir una unidad de producto eficientemente, lo cual es uno de los principios agroecológicos importantes (Bonaudo et al., 2014).
A pesar de la reciente expansión de los sistemas de producción bufalinos en el trópico húmedo mexicano, todavía son pocos los estudios que los caractericen y evalúen a detalle, Sistema de producción de búfalos de agua de doble propósito del trópico húmedo mexicano SPBDP, por lo cual se reitera la trascendencia de generar información primaria que describa la gestión inherente a los sistemas de producción de búfalo de doble propósito en el trópico húmedo mexicano. Las variables e indicadores generados podrían servir como valores de referencia para futuras investigaciones de los SPBDP, en aras de identificar áreas de oportunidad y posibles reconfiguraciones de dichos sistemas y, más generalmente, en países con condiciones similares. Este documento muestra la gestión zootécnica (manejo sanitario, reproductivo y de ordeño) de cuatro sistemas de producción de búfalos de agua de doble propósito del sur-sureste mexicano.
METODOLOGÍA
Se desarrolló un análisis retrospectivo que refiere al año 2019 y consistió en caracterizar el manejo sanitario, reproductivo y de ordeño de cuatro sistemas de producción de búfalos de doble propósito SPBDP ubicados en el trópico húmedo mexicano. La estrategia metodológica utilizada se compone de seis pasos, los cuales fueron descritos en el artículo “Aspectos sociales, mano de obra, tenencia de la tierra, manejo reproductivo y genético de los sistemas bufalinos doble propósito en México”.
El estudio se realizó en Hidalgotitlán, al sur de Veracruz, unidad de producción 1 (UP1); Pinotepa Nacional, Oaxaca, Unidad de producción 2 (UP2); Villahermosa, Tabasco, Unidad de producción 3 (UP3) y Unidad de producción 4 (UP4).
Para este estudio se definieron 13 variables, tanto cualitativas como cuantitativas (Cuadro 1). También se construyó un índice para el manejo reproductivo. Los índices se obtuvieron a partir de variables dicotómicas que representaban la ausencia o la presencia de la tecnología que implementan o con la que cuenta cada una de las unidades de producción. Los conceptos con los que se contaba se codificaron con 1 y, en caso contrario, con 0.
Cada uno de los índices fueron calculados de acuerdo con la siguiente ecuación:
〖NT〗_j=(∑_(i=1)^(n_j)▒x_ij )/n_j x 100
NTj : nivel tecnológico de la dimensión j
xij : tecnologías seleccionadas del área j
nj : número total de tecnologías seleccionadas en el área j
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Manejo reproductivo
En las UP se realizaba un manejo reproductivo en función de las particularidades anatómicas y fisiológicas de la búfala y el propósito zootécnico, en este caso, principalmente se utilizan métodos de reproducción asistida que les permite mejorar genéticamente y gestionar las particularidades reproductivas de la especie. Según los datos recolectados el método de reproducción más utilizado es la inseminación artificial a tiempo fijo IATF, seguido de monta directa MD, ambos por arriba de inseminación artificial a celo detectado IACD, 61% ± 18%, 24% ± 25% y 14% ± 17% respectivamente (Cuadro 2). En contraste, diversos estudios en sistemas de producción de doble propósito de bovinos convencionales del género Bos reportan baja o nula utilización de herramientas tecnológicas reproductivas en los ambientes tropicales (Cuevas et al., 2013; Granados-Rivera et al., 2019; Vilaboa-Arroniz et al., 2008) (Figura 1).
En cambio, no se detectaron casos de trasferencia de embriones (TE) y semen sexado, aunque se han comenzado las importaciones de dichas tecnologías que podrían aceleran el progreso genético en los SPBDP (Bertoni et al., 2019).
En el grupo de productores estudiado es evidente que existen iniciativas por adquirir recursos genéticos mejorados y tecnologías de reproducción asistida que consideren la estacionalidad reproductiva de la búfala y la dificultad de detección de estros, por lo que ha sido frecuente la utilización de IATF y, en caso de utilizar IACD, se incluye un animal celador vasectomizado para la identificación de hembras viables para la implementación de la tecnología.
Lo anterior se debe a que los signos de estro, como edema vulvar, micción frecuente y secreción vaginal se presentan con poca intensidad, lo cual dificulta la detección de manera visual para que coincidan con los tiempos óptimos para inseminar a celo detectado EDAI, ya que generalmente la búfala presenta una baja concentración de estradiol (Bertoni et al., 2020a; Zicarelli, 2016). Se ha revelado que solo el 3.4% de las búfalas revelan comportamiento homosexual y más del 60% tienen estro silencioso (33,37). De hecho, el búfalo es capaz de percibir a través del órgano vomeronasal VNO sustancias químicas que proyectan señales hacia el bulbo olfatorio y diversas estructuras del sistema límbico y sistema nervioso autónomo, lo cual desencadena en el reconocimiento de la hembra en estro (Neglia et al., 2020).
En países como Colombia, Argentina y Venezuela, se ha logrado implementar métodos de reproducción asistida más complejos como la trasferencia de embriones y el uso de semen sexado, en algunos casos incluso se ha trabajado con pruebas genómicas que identifiquen los animales con mayor potencial genético dentro de la finca. Al conjugar todas estas herramientas se han logrado potenciar características de importancia para la industria láctea y cárnica (39,40), en México se ha avanzado de manera continua hacia la adopción de nuevas tecnologías reproductivas, sin embargo, la ausencia de normativas ha frenado algunas implementaciones tecnológicas que requieren permisos zoosanitarios como la importación de embriones (28,40).
Manejo sanitario
Respecto al manejo sanitario, sólo la UP2 realiza baño garrapaticida en animales jóvenes, en adultos no se realiza en el total de las UP (Cuadro 3). Una posible explicación respecto a esta baja frecuencia de manejo sanitario podría ser la piel gruesa y la conducta frecuente de sumergirse en agua y revolcarse en charcas (Barros et al., 2016; Bertoni et al., 2020b; Marai and Haeeb, 2010; Mota-Rojas et al., 2021), lo que reduce la capacidad de estos insectos para adherir sus hipostomas en la piel del búfalo. Aunque cabe señalar que un estudio realizado por Obregón (2020) muestra que a diferencia de los búfalos adultos, los terneros búfalos exhibieron infestación por garrapatas. Por tanto, se podría sugerir la aplicación de baños garrapaticidas en animales jóvenes.
Concerniente a la aplicación de vacunas y bacterinas, el total de los ganaderos aplica biológicos contra Clostridium sp, pero contra Brucella abortus solo el 50% de las UP. El 75% de las UP desparasita internamente al total de sus animales al menos una vez por año. En promedio, el índice de manejo sanitario fue de 56% ± 13% (Cuadro 3).
Son muchas las capacidades del búfalo para adaptarse al medio, pero no debe pasarse por alto que es un ente biológico y aunque la mayoría de las veces no presenta signos de alguna enfermedad, este puede portar y trasmitir enfermedades que podrían afectar a otras especies ganaderas (Barrios-García et al., 2020; Martínez-Burnes et al., 2020), por lo que, antes de poder emitir alguna recomendación en este rubro, es importante elaborar protocolos de diagnóstico que identifiquen la situación sanitaria por región y, en su caso, adherir a dicha especie en campañas zoosanitarias como medida de control y no propagación (Napolitano et al., 2020). Cabe señalar que el total de unidades de producción están realizando pruebas para identificar Brucella, en caso de identificar animales positivos, se desechan animales positivos y se reporta a las autoridades pertinentes.
Manejo del ordeño
A razón del manejo de ordeño, se encontró que la UP1 utiliza una técnica mixta (manual y mecánico) dependiendo la edad del bucerro para asegurar una adecuada dotación a los terneros. Las madres que tengan un bucerro con un correcto desarrollo (peso y condición corporal) son canalizadas al ordeño mecánico posterior a dos meses del parto, caso contrario, se mantienen en el ordeño manual. La UP2 realiza exclusivamente el ordeño manual y para la UP3 y UP4, sólo se realiza de forma mecánica (Cuadro 4). Para estas tres unidades de producción mencionadas el sistema de ordeño se realiza indistintamente de la edad y condición de los bucerros.
Este dato resulta similar a lo reportado por Granados-Rivera et al. (2019) quienes identificaron una alta utilización del ordeño mecánico, no obstante difiere de lo mostrado por dos autores quienes reportaron que la práctica que predomina en las unidades de producción de bovinos de doble propósito es el ordeño manual (Juárez-Barrientos et al., 2015; Magaña-Monforte et al., 2006), aunque en la especie bufalina es necesario considerar las características de comportamiento, anatómicas y fisiológicas (capacidad de la cisterna de la ubre, pezones cónicos, canales de esfínteres muy reducidos y con rápida formación de tapones de queratina) para establecer una rutina de ordeño adecuada, ya que la búfala presenta mayor susceptibilidad a factores estresantes durante el ordeño en comparación con los vacunos (Mota-Rojas et al., 2020, 2019; Olmos-Hernández et al., 2020) (Figura 3).
En relación con la frecuencia de ordeño por día, tres de las UP extraen la leche de la glándula mamaria una vez al día y solo la UP3 realiza el ordeño dos veces por día, lo que indica mayor intensificación y priorización por el producto leche en comparación con el resto de las UP estudiadas, de hecho, el aumento en el número de ordeños podría incrementar la producción láctea (Faugno et al., 2015), no obstante, con el inconveniente de que el periodo de desarrollo de las crías destinadas para venta podría prolongarse. Cabe señalar que el equipo de ordeño suele ser similar al utilizado en bovinos convencionales, no obstante, la estructura tubular de la sala de ordeño suele ser más ancha en búfalos de agua, ya que éstos presentan mayor anchura corporal (Napolitano et al., 2020).
El total de las UP utiliza oxitocina para promover la eyección de la leche, especialmente las que realizan ordeño mecánico, la UP1 y UP2 además de oxitocina, aplican estímulos sensoriales al tener presente al bucerro para estimular la eyección de leche, y la UP3 complementa el estímulo con la adición de alimento balanceado durante el proceso de ordeño, como incentivo rutinario de dicho proceso (Cuadro 4). Resulta de gran importancia la presencia del bucerro para la eyección de leche ya que la búfala sólo almacena el 5% de la leche en la cisterna y lo restante se encuentra en la porción alveolar (Bertoni et al., 2020c; Olmos-Hernández et al., 2020), por lo que, la leche alveolar solamente se encuentra disponible si es eyectada activamente por la contracción de las células mioepiteliales como respuesta a estímulos somatosensoriales proporcionados por la cría (Bertoni et al., 2020d; Espinosa et al., 2011).
CONCLUSION
Respecto a manejo reproductivo, se logra ver que el total de las unidades de producción adquieren recursos genéticos de países con programas de mejoramientos más avanzados y tecnologías de reproducción asistida que consideren la estacionalidad reproductiva de la búfala y la dificultad de detección de estros, por lo que ha sido frecuente la utilización de IATF y, en caso de utilizar IACD, se incluye un animal celador vasectomizado para la identificación de hembras viables para la implementación de la tecnología. La implementación conjunta de biotecnologías reproductivas coadyuva en avanzar genéticamente hacia objetivos de importancia productiva y tener ciclos estrales controlados que podrían estar programados en función de la disponibilidad forrajera.
Existen protocolos sanitarios en todas las unidades de producción. El ordeño se realiza en función a las características anatómicas y fisiológicas de la búfala lechera. La UP3, muestra un grado de intensificación más alto en comparación con el resto.
Bibiografía
Para mayores detalles sobre temas de búfalos de agua consulta la 3ra. Edición GRATIS en español del libro: Fabio Napolitano; Daniel Mota-Rojas, Isabel Guerrero-Legarreta, y Agustín Orihuela. The Latin American River Buffalo, Recent Findings. 3rd ed.; BM Editores: Mexico City, 2020; 1- 1545. https://www.lifescienceglobal.com/journals/journal-of-buffalo-science/97-abstract/jbs/4550-el-bufalo-de-agua-en-latinoamerica-hallazgos-recientes
Artículo publicado en Entorno Ganadero Abril- Mayo 2022