Redacción BM Editores.
En materia alimentaria México se encuentra en un contexto muy difícil, que inició con la pandemia de la COVID-19 y se agravó con el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, factores que han repercutido en el precio internacional de las materias primas y también presionado los costos de producción de los alimentos, aseguró el Director General del Consejo Nacional Agropecuario (CNA) Ing. Luis Fernando Haro Encinas.
Al presentar el documento “La Inflación en el Precio de las Materias Primas y su Impacto en la Producción de Alimentos”, Haro Encinas subrayó que 40 por ciento de las materias primas con las que México produce alimentos son importadas, tal es el caso de los fertilizantes, de los cuales el país depende de manera importante de las adquisiciones que realiza de Rusia, uno de los participantes en el conflicto bélico.
Por ello, añadió, se está registrando un impacto negativo en la rentabilidad de las actividades productivas desde el 2021, afectando y poniendo en riesgo la utilidad de los productores.
Ante este panorama se han tomado una serie de medidas en materias de producción y distribución, como el destinar 330 mil millones de pesos para estabilizar los precios de los energéticos y el de la entrega de fertilizantes a través del Programa “Fertilizantes para el Bienestar”, que se amplió de cinco a nueve estados, además de no incrementar los peajes de carreteras de CAPUFE y FONADIN durante este año y la Exención de Carta Porte (básicos e insumos) hasta el primero de octubre también del 2022.
Por lo tanto, señaló, en materia de inflación es necesario comprender que los precios de los alimentos están regidos por la ley de la oferta y la demanda, además de que al sector agroalimentario no lo convienen precios elevados, porque cae la demanda.
Con base en esta reflexión, es pertinente señalar que los aumentos en los precios de los insumos y costos de producción presionan fuertemente a lo precios al consumidor, y que el quitar aranceles no garantiza contar con precios bajos, pues la inflación afecta a todos los países.
Por todo esto, puntualizó, el CNA promueve en primer lugar que no existan alzas en alimentos con precios injustificados, pero sobre todo propone incentivar la producción doméstica de los productos básicos mediante programas que apoyen la producción sin importar el tamaño del productor.
