Redacción BM Editores.
Cada vez más la industria de la carne busca la manera de mejorar sus procesos, sobre todo para atender más ampliamente la demanda de los consumidores, tal es el caso de los procesadores de carne de ave que alrededor del mundo implementan nuevas estrategias para aprovechar al máximo cada gramo de esta especie, se informa en el Portal CARNETEC.
Por esta razón las plantas avícolas se han decidido a instalar un departamento completo de carne separada mecánicamente (MSM, por sus siglas en inglés), para aprovechar al máximo la carne de ave.
Para la producción de salchichas de pollo, hamburguesas de pollo o carne molida, la carne obtenida a través de MSM cumple ciertos requisitos, siendo el porcentaje de grasa constante el más importante de ellos.
Actualmente en el mercado ya existen tecnologías que permiten aplicar el MSM, pues es una excelente herramienta para analizar y calcular el porcentaje de grasa de todo el material entrante, recortes o carne molida.
Las tecnologías hoy disponibles se han diseñado para ayudar a los procesadores de aves a ofrecer un producto de alta calidad uniforme, reduciendo al mismo tiempo sus costos y tiempo.
Hasta ahora, los métodos de análisis fuera de línea implicaban mucho trabajo manual, errores humanos, calidad inconsistente del producto y fallos en la trazabilidad, lo que representa a un importante impacto en la rentabilidad.
La tecnología actual de los procesadores de aves tiene más control de sus procesos, productos y proveedores. El sistema en línea puede suministrar un producto de carne de ave constante con un mínimo de desechos controlando el proceso en tiempo real.
Gracias al uso maximizado de las materias primas, estas tecnologías mejoran la productividad y la rentabilidad, además de que reducen la necesidad de trabajo manual como el recorte y de este modo, generan menos errores humanos y, también, ahorran costos y tiempo, a la vez que ofrece una mayor facilidad de rastreo.
Los equipos hoy ya en el mercado miden con precisión y muestran el magro químico (CL), el valioso componente de la carne, en los recortes de carne, la carne picada o en dados. Adicional a estos equipos, algunos otros añaden una tecnología de espectroscopía única que emite luz visible y del infrarrojo cercano (Vis/NIR) para asegurar una penetración profunda en la carne.
Los sensores capturan la luz transflectiva que regresa con información sobre el comportamiento de absorción para realizar un análisis de la relación magro/grasa.
Con base en los análisis que arrojan los equipos. El procesador puede ajustar la mezcla de los componentes de la carne para garantiza el porcentaje de grasa constante del producto final.
De este modo, el control preciso garantiza una calidad superior y los máximos niveles de homogeneidad del producto final, ya sea fresco o congelado.
Cabe destacar que las nuevas tecnologías, gracias a su altura reducida y al ángulo de cinta ajustable, pueden ubicarse después de cualquier picadora o trituradora. Su diseño compacto, abierto y ligero permite la integración sencilla en una línea de producción existente.
Además, la baja necesidad de mantenimiento y el consumo reducido de energía también contribuyen a un funcionamiento productivo y eficiente.
